Con 189 kilómetros de pistas esquiables y 54 remontes con capacidad para transportar hasta 75.175 esquiadores por hora, el 70 % de ellos impulsados por energías renovables, FGC TURISME alcanza cada temporada alrededor de 765.000 días de esquí.

 

Aunque estas cifras podrían asociarse a un gran dominio alpino, pertenecen a las seis estaciones catalanas gestionadas por Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya: La Molina, Vall de Núria, Vallter, Espot Esquí, Port Ainé y Boí Taüll.

 

El firme compromiso de FGC TURISME con la sostenibilidad se refleja en iniciativas como la apuesta por energías renovables en la mayoría de sus instalaciones, la reducción del consumo de agua y el esfuerzo constante por preservar el entorno natural en el que operan.

Además, todas las estaciones avanzan en la digitalización de sus servicios, con innovaciones como la venta online de forfaits y la implantación de sistemas de acceso sin contacto, mejorando la experiencia del esquiador y reduciendo el impacto ambiental.

 

Las seis estaciones de FGC TURISME también juegan un papel clave en la promoción y dinamización turística del territorio durante todo el año. A través de propuestas como rutas de senderismo, ciclismo de montaña y actividades de turismo activo, los visitantes pueden descubrir los Pirineos en cualquier estación.

 

Estratégicamente distribuidas en el Pirineo catalán, las estaciones de FGC TURISME abarcan diversas comarcas: La Molina se extiende entre la Cerdanya, el Ripollès y el Berguedà; Vall de Núria y Vallter se ubican en el Ripollès; Espot Esquí y Port Ainé en el Pallars Sobirà; y Boí Taüll en la Alta Ribagorça.

 

Estas estaciones no solo destacan por su extenso dominio esquiable, sino también por la variedad de actividades que ofrecen. El esquí alpino sigue siendo el gran protagonista, con opciones para todas las modalidades, desde competición y freeride hasta freestyle, adaptándose tanto a principiantes como a esquiadores expertos.

 

 

 

 

 

Con 71 km de pistas, acoge eventos de la Copa del Mundo de esquí alpino, competiciones de snowboard y pruebas de esquí adaptado, lo que la convierte en una estación inclusiva y deportiva a la vez.