Las discusiones y maltraeres de los políticos afectan, una vez más, a las estaciones de esquí de San Isidro y Fuentes de Invierno, que a nuestro entender, estarían la mar de a gusto sin tantas rencillas si aquellos se dedicaran a hacer bien su trabajo y se pusieran a los suyo, administrar bien, y digo bien, los cuartos de los contribuyentes y a pagar cada uno lo que le corresponda en interés general.