Esta pasada noche, durante la madrugada, una avalancha sepultaba los coches que se hallaban aparcados en el parking de la Résidence 1.900 de la estación de esquí de la Mongie, en la región de los Altos Pirineos franceses.
Los gendarmes, bomberos y protección civil galos acudieron rápidamente junto a los servicios de regionales de socorro y de la propia estación para asegurarse de que no hubiera ninguna víctima como afortunadamente así ha sido.