El pasado 1 de mayo marcó el final de la temporada de invierno 2017-2018 en Val d'Isère y también el final de una época, porque fue el último día de funcionamiento de la mítica góndola de La Daille, inaugurada por primera vez a fines de la década de 1960.

 

El telecabina de POMA en La Daille, que sobrevuela la pista OK (Killy Pillow), fue construido en 1966 y renovado en 1994. Ahora ya es historia y la próxima temporada será reemplazado por un nuevo modelo de lujo de 10 plazas, que supondrá un importante desarrollo en el sector de La Daille.

 

 

Asientos con calefacción, interior más grande, vista panorámica, puertas correderas... Cada cabina permitirá transportar a 10 personas, lo que lleva el flujo final a 2.800 personas por hora, contra las 933 de la actualidad. 

 

La góndola de La Daille estará equipada con 50 cabinas Premium Symphony de 10 plazas y una VIP. Estas cabinas de nueva generación han sido ideadas por el diseñador italiano Pininfarina (Ferrari y Maserati) y supondrán más seguridad, comodidad y modernidad. Gracias a las puertas correderas, el mecanismo de apertura no causará molestias al esquiador si está ubicado cerca de ellas.

 

 

La línea de la futura cabina será idéntica a la actual, desde la cota 1.802 m a 2.294 m y mantendrá un final en La Folie Douce. Sin embargo, si con la actual góndola se tardaban 9 minutos en llegar a la cima de La Daille, a partir del próximo invierno de 2018/2019, se ganará un valioso tiempo en las pistas, ya que la subida se realizará en 4,30 minutos.

 

Las obras de construcción del nuevo telecabina empezarán este verano y supondrán una inversión de 10 millones de euros. Además, se eliminará el telesilla Etroits y, como parte del compromiso de la empresa francesa Poma con Green Globe, se retirarán las 40 pilonas del telecabina desmantelado.