Después de un largo período de sequía, se han producido nevadas sin precedentes, a veces superiores a dos metros, en varias ciudades del sur de Marruecos, incluidas Ouarzazate, Zagora y Taroudant, durante más de dos días.

 

A causa del temporal, 24.000 familias han debido recibir ayuda y 87 pueblos han quedado aislados en la región de Ouarzazate y Zagora durante el fin de semana, aunque ahora ya se han abierto algunos accesos.

 

Las comunas de Tidli y Telouat en la provincia de Ouarzazate sufrieron, por ejemplo, cortes en los caminos rurales y en la red eléctrica y telefónica de la región. Según los vecinos, la altura de la nieve ha llegado a más de un metro, un nivel que no se registraba desde hace años.

 

También se interrumpió el tráfico en la carretera nacional n.º 9, que une Ouarzazate y Marrakech, a la altura de las montañas Tichka, creando dificultades para automovilistas y camioneros.

 

La Fundación Mohamed V por la Solidaridad ha aportado en los últimos días asistencia humanitaria (comida y mantas) a 9.000 familias afectadas por el temporal en la región de Ouarzazate, donde las nevadas alcanzaron los 2,2 metros de espesor, 10.000 familias en Taroudant y 5.000 en Zagora.

 

Y en Taroudant, se ha intervenido en 259 pueblos afectados por la ola de frío, situados a una altitud de más de 1.900 metros.

 

Para conseguir desaislar los pueblos que quedaron atrapados por el temporal se están empleando 88 máquinas quitanieves.

 

El rey Mohamed VI dio instrucciones este fin de semana para acelerar las ayudas destinadas a los pueblos afectados por el temporal en las tres provincias.

 

Uno de los más afectados está siendo Ouarzazate donde la nieve alcanzó alturas inéditas, con cortes de carreteras y suspensión de clases.

 

La Dirección General de Meteorología lanzó una nueva alerta naranja por nevadas este lunes de entre 10 y 20 centímetros en las zonas más altas de las provincias de Haouz, Taroudant, Ouarzazate y Tinghir, conocidos destinos turísticos por su paisaje, sus gargantas, valles y kasbahs.

 

Marruecos es un país que cuenta con varias montañas y cordilleras, como el Atlas y el Rif, que pueden experimentar nevadas durante los meses más fríos del año, especialmente entre noviembre y abril.

 

 

Sin embargo, también es cierto que las nevadas en Marruecos no son una característica constante en todo el país, ya que en algunas regiones, especialmente en las zonas más cercanas al desierto del Sahara, el clima es mucho más cálido y seco, y las nevadas son poco frecuentes o inexistentes.