El Grupo galo Rossignol especalizado en material para los deportes de nieve, ha vendido el 20% de sus acciones a un grupo inversor chino, se trata de IDG Capital, con el objetivo de acelerar sus planes de expansión en Asia y el mercado chino en concreto, todo en vistas al previsible auge del deporte blanco debido a las Olimpiadas de Beijing 2022. Se da la circunstancia que el nuevo accionista de la marca francesa ya tiene un cierte bagaje deportivo al poseer una participación accionarial importante del club de fútbol Olympique Lyon.

 

Rossignol está controlado por el fondo noruego Altor, quien posee la mayoría de las acciones, además está participada también por Sandbridge Capital, la familia Boix-Vives y Weber Capital. La entrada de IDG en el accionariado tiene como objetivo convertir a Rossignol en una marca de referencia para el mercado asiático gracias a su conocimiento de este mercado.

 

Idg Capital es una gran empresa de inversión que ha catapultado en su crecimiento a más de 700 compañias chinas. Participa también en los Juegos Olímpicos a través de Infront, la compañía -de la cual tiene una importante participación- que gestiona los derechos televisivos y licencias de merchandising de los medios para todo el planeta.

 

La afición a los deportes invernales en China no para de crecer. En cinco años han pasado de vender 5 millones de forfaits a 17 este invierno 2017/18. La rprevisión es llegar a los 100 millones de forfaits vendidos en 2025.

 

Los expertos chinos estimana que para ese 2025, el mercado de los deportes de invierno en el gigante asiatico llegará a los 13.700 millones de euros de volúmen de negocio. La venta de equipo para el esquí y el snowbaord representará el 16% de esta cifra.