El deportista barcelonés, que ya fue el campeón en las dos primeras pruebas de la temporada celebradas en Calgary (Canadá)-, da un paso de gigante para consolidarse entre los primeros de la clasificación final en esta competición.

 

Este sábado 5 participará en la segunda de las pruebas que también tendrá lugar en el trazado que acogió los Juegos Olímpicos de Salt Lake City 2002. Mirambell ha asegurado que tras la prueba ha tenido que “secar las lágrimas de emoción y alegría, porque la verdad es que hoy hemos cuajado una gran primera bajada y una buena segunda, y nos han servido para volver a sacar una medalla de oro internacional. Si lo de Calgary el pasado noviembre fue brutal, esto ya no tiene nombre”.

 

El piloto ha afirmado que las condiciones de competición no han sido las óptimas porque “la victoria ha llegado solo 6 días después de hacer la última Copa del Mundo en Königssee y con 30 horas de viaje y jet lag”.

 

Sobre la competición, ha reconocido que “la primera bajada ha sido una de las mejores que he hecho en toda la temporada, incluso mejorando en 11 centésimas el registro que hice en la salida en la Copa del Mundo”. Por su parte, en la segunda “ha tocado gestionar los nervios de ser el líder, algo a lo que no estoy acostumbrado. La salida ha sido aún mejor, y tan sólo hemos fallado en la última curva. Parece que cada vez que se acerca más la operación del ligamento de la rodilla estoy todavía más rápido”.