El secretario general de Vicepresidencia de la Generalitat, Ricard Font, ha explicado que el gobierno estima que los Juegos Olímpicos de Invierno de 2030 costarían unos 1.390 millones de euros si finalmente se celebran en el Pirineo catalán, y que supondrán unos ingresos de 1.500 millones de euros.

 

Lo dijo este viernes en una entrevista en el programa El Món a RAC1, con Jordi Basté, en la que añadió que se espera un superávit, como ya ocurrió en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, y que se plantea un modelo similar al de los Juegos Olímpicos de Invierno de Milán 2026.

 

Font ha defendido los JJ. OO. y se ha preguntado "cuánto vale 15 días de publicidad de un territorio a nivel global y siete años hablando del Pirineo".

 

Además, cree que el Pirineo catalán tiene la capacidad de acoger a todos los deportistas que participarán en las pruebas de montaña, que serían entre 1.000 y 1.200 -aparte de otros 2.000 en Barcelona--, sin la necesidad de crear una villa olímpica de nueva construcción.

 

 

El proyecto catalán prevé que las pruebas de esquí alpino se hagan la Molina y Masella (Cerdanya), y las de freestyle y snowboard , en Baqueira Beret (Val d'Aran). Como las pistas catalanas están todas por encima de los 1.800 metros, las competiciones de esquí de fondo y biatlón podrían realizarse en Aragón.

 

El secretario general de Vicepresidencia descartó la construcción de infraestructuras para acoger pruebas como los saltos de esquí o el bobsleigh, que "no tienen tradición en Catalunya" y que costarían unos 200 millones de euros.

 

Estas pruebas, que tampoco pueden realizarse en Aragón, podrían disputarse en las instalaciones existentes de Albertville, Tignes o Courchevel (Francia); mientras que la opción de Sarajevo (Bosnia y Herzegovina) es una idea "romántica".

 

Las únicas infraestructuras que habría que terminar independientemente de los Juegos son la línea R3 de tren y el tercer carril de la C-16.

 

Font, como miembro del Departamento de Políticas Digitales y Territorio, es uno de los responsables de estos Juegos de Invierno que quiere poner en marcha la Generalitat con la colaboración del Ayuntamiento de Barcelona, ​​Aragón y Francia.

 

 

Barcelona sería la sede de las competiciones de hielo (hockey sobre hielo, patinaje artístico...) y las pruebas se podrían disputar en el Palau Sant Jordi, el nuevo Palau Blaugrana y en el Pavelló Olímpic de Badalona. Según Font, para las competiciones de patinaje sobre hielo se podría habilitar un espacio en la Fira de Barcelona.

 

Uno de los aspectos importantes que se ha abordado en la entrevista es el cambio climático y Font ha respondido que hay estudios que indican que la cantidad de nieve que hubo en los Pirineos entre 2001 y 2010 fue superior a la que ha habido entre 2010 y 2020, pero que, sin embargo, la nieve no ha desaparecido. "Es posible que haya tranquilamente nieve en 2030, ya que los estudios no indican lo contrario", ha defendido el secretario general.

 

Font ha insistido en que el Govern tiene la intención de sacar adelante el proyecto olímpico y que las manifestaciones que han hecho algunos miembros del entorno de los partidos que forman parte del ejecutivo catalán no rompen el compromiso de la Generalitat con estos Juegos.

 

 

"Estamos trabajando de manera conjunta el Departamento de la Presidencia, así como Vicepresidencia y Exteriores, que son consejerías de los dos partidos que forman parte del Gobierno", ha señalado Font durante la entrevista.

 

Para que las olimpiadas sean posibles habrá que contar seguramente con la colaboración de Aragón y Francia. Por lo que ha explicado Font este viernes, Andorra queda fuera de la ecuación, pero Aragón es fundamental “porque hay algunos deportes que no se podrían practicar en nuestro país, ya que los Pirineos catalanes no reúnen las condiciones necesarias para que se pueda practicar esquí a fondo en la forma que lo reclama el Comité Olímpico Internacional”.