Después de un sábado en el que las intensas rachas de viento obligaron al cierre de la estación, Sierra Nevada vuelve a ponerse en el mapa invernal con la sucesión de nevadas más destacada de la temporada.

 

 

 

La meteorología ha jugado un papel dual en la evolución de las condiciones de la montaña. Por un lado, el viento ha sido el principal responsable de impedir el funcionamiento de algunos remontes de mayor altitud, como el telesquí Zayas y el telesilla Laguna.

 

Por otro, estas mismas ráfagas han contribuido a la formación de paravientos y ventisqueros naturales, creando verdaderos escenarios de postal y acumulaciones de nieve que han transformado el aspecto de las pistas.

 

 

 

Según Cetursa, la entidad que gestiona la estación, este espectacular avance en la acumulación de nieve es la mejor sucesión de nevadas registrada hasta ahora en la campaña invernal, lo que permite aventurar con optimismo un gran último tercio en la temporada de esquí 24/25.

 

 

La previsión meteorológica augura que este ciclo de precipitaciones continuará durante la semana, con un lunes con ráfagas de nieve moderadas y persistentes, con episodios de chubascos intensos, y una cota que se elevará de 1.600 a 2.000 metros.

 

El martes, se pronostican nevadas débiles o moderadas en la franja de 1.800 a 2.000 metros, tendencia que se mantendrá al menos hasta el jueves.

 

La comunidad esquiadora y los gestores de la estación esperan con entusiasmo que estos cambios meteorológicos culminen en un cierre de campaña inolvidable para la temporada 24/25.