Las estaciones de Aragón empiezan a invertir los 80 millones que tienen para nieve artificial
Los cañones de nieve, preparando el arranque de la temporada pasada. (Foto: Aramón)
Mié, 21/08/2024 - 18:09
Arrancan las obras y empieza a llegar el material para sustituir y poner más cañones en Formigal, Cerler y Panticosa, luego les seguirán Astún y Candanchú.
Las estaciones de esquí de Aragón han comenzado a desplegar un ambicioso plan de innivación artificial que cuenta con una inversión histórica de casi 80 millones de euros.
Este proyecto, que abarca las dos próximas temporadas, busca no solo garantizar la viabilidad de la temporada de esquí, sino también modernizar y ampliar la infraestructura existente para asegurar la competitividad de las estaciones aragonesas en el panorama nacional e internacional.
El grupo Aramón, que gestiona las estaciones de Formigal, Cerler y Panticosa, ha sido el primero en beneficiarse de este plan, con trabajos ya en marcha que se centran en la modernización y ampliación de su red de cañones de nieve.
Desde hace semanas, los visitantes han podido observar la llegada de materiales y el inicio de las obras en estos complejos, con la vista puesta en tener todo listo para la campaña de esquí 2024-2025.
En concreto, se están llevando a cabo actuaciones en tres pistas clave: Cuartalé y Los Asnos en Panticosa, y La Carbonera en Formigal.
Estos proyectos, que abarcan más de 8 hectáreas, no solo mejorarán la calidad de la nieve en zonas críticas afectadas por el viento y la insolación, sino que también aumentarán la superficie esquiable, un factor decisivo para atraer a más esquiadores.
La temporada pasada, la tecnología de innivación ya demostró su importancia, permitiendo la apertura temprana de pistas en un invierno que se mostró esquivo con las precipitaciones naturales.
El plan de innivación de Aragón no solo busca asegurar la producción de nieve con mayor eficiencia y en condiciones más variadas, sino que también reemplazará equipos obsoletos.
Los antiguos cañones, que requerían temperaturas de hasta 5 o 6 grados bajo cero para funcionar, serán sustituidos por tecnología moderna capaz de producir nieve con temperaturas apenas por debajo de cero.
Aunque el foco inicial está en las estaciones de Aramón, el plan también contempla actuaciones en las estaciones privadas de Astún y Candanchú.
Estas estaciones están a la espera de que el Gobierno de Aragón concrete las ayudas para poder avanzar en la mejora de sus instalaciones.
La intervención en estas áreas es crucial, ya que forman parte del atractivo global del Pirineo aragonés, una de las joyas del esquí en España.
Uno de los mayores desafíos de este plan de innivación es el impacto ambiental. Por ejemplo, el proyecto para la pista de La Carbonera en Formigal requiere una autorización ambiental por parte del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga), lo que podría retrasar su ejecución hasta la temporada 2025-2026.
Este trámite es necesario para asegurar que las intervenciones se realicen de manera sostenible, minimizando el impacto en el entorno natural.
El proyecto elaborado por la empresa Technoalpin, que ya está en exposición pública, detalla no solo la captación y almacenamiento de agua necesarios, sino también los trazados para las tuberías, el suministro eléctrico y la distribución de los cañones de innivación.
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