“El esquí aún no está muerto y no hay razón para hacerlo desaparecer mientras sea perfectamente viable. Esta industria goza de buena salud”.
Lo dice el especialista en estrategia, análisis empresarial, gestión, análisis organizativo e investigación de mercados, convertido en un experto en turismo alpino, Laurent Vanat, en la 16ª edición del Informe Internacional sobre Turismo de Nieve y Montaña de la temporada de esquí 2022-23 en todo el mundo.
¿Qué se entiende por 'Días de Esquí' vendidos?
El estudio concluye que la industria del esquí goza de buena salud y alcanzó niveles de asistencia que igualaron el promedio de las últimas dos décadas, con 372 millones de días de esquí registrados en todo el mundo para la temporada 2022-2023.
China fue el único mercado donde el esquí aún se vio afectado por los últimos impactos del covid-19. En todos los demás países, la pandemia forma parte del pasado y los esquiadores han vuelto a las pistas.
Laurent Vanat en el Moutain Planet de Grenoble. (Foto:© Radio FranceRadio)
El informe señala que “a pesar de la ideología anti-esquí difundida por los principales medios de comunicación, los políticos y parte del público en general, el esquí aún no ha terminado. Muchos destinos de montaña de todo el mundo están felices de seguir recibiendo a sus huéspedes invernales, abasteciendo una parte sustancial de su economía local”.
Y precisa: “Aunque todos en la industria son conscientes de los problemas climáticos y trabajan duro para consolidar una lógica de 4 estaciones cuando tenga sentido, el camino es largo y no fácil. Pero no hay forma de acabar con el esquí mientras siga perfectamente vivo y siga así durante mucho tiempo en la mayoría de las estaciones que constituyen la mayor parte del negocio del esquí”.
Según Vanat, el dinamismo de la industria del esquí quedó demostrado una vez más durante la temporada 2022/23 con:
- Récords de asistencia en varios de los principales mercados maduros;
- Las visitas derivadas de pases de temporada van en aumento en varios países;
- Desarrollo de soluciones innovadoras de venta de forfaits, con una difusión continua de precios dinámicos y modelos de precios alternativos, como el pago por uso;
- Pasar del tradicional servicio al visitante centrado en la venta de forfaits para remontes a ofrecer una experiencia en la montaña;
- Inversiones tanto para consolidar el negocio del esquí como para diversificar actividades;
- Incremento de la actividad durante las 4 estaciones, mejorando la sostenibilidad económica de los operadores de remontes.
En comparación con el promedio de cinco años anterior al covid-19, la temporada de esquí 2022/23 presenta altibajos según los países.
Garmisch-Partenkirchen. Alemania ha vivido la pero temporada a diferencia de Estados Unidos, Canadá e Italia.
Más esquiadores, pero menos horas de esquí
El número de esquiadores está aumentando, pero esquían menos que antes (estabilidad de los días de esquiador). “Varios grandes mercados maduros están registrando récords de asistencia, como Estados Unidos, Canadá e Italia, a diferencia de Alemania (la peor temporada que ha vivido) y la región Asia-Pacífico, rezagada por el descenso de Japón”, afirma el especialista, añadiendo que “Francia, y especialmente Austria, aún no han vuelto al nivel de los promedios quinquenales anteriores al covid”.
Para él, este aumento de asistencia se debe también al desarrollo de los pases de temporada, especialmente multi resort, en diferentes países. En esta lógica, la venta de forfaits está evolucionando.
“Estamos viendo cómo surgen nuevas soluciones innovadoras y se generalizan los precios dinámicos y los modelos de precios alternativos (pago por uso, etc.)".
Alpe d'Huez. En los Alpes, se hn renovado el 70 por ciento de los remontes.
En cuanto a las inversiones, el estudio indica que se ha renovado una media del 25% de los remontes, pero mucho más en los Alpes, donde esta cifra alcanza el 70%, en Europa del Este y también en Asia Central.
Respalda esta afirmación ofreciendo algunas vías de mejora. Empezando por la experiencia del cliente dentro de los resorts, que es muy importante: “Hay un enorme potencial de progreso para captar clientes y hacer estos destinos más atractivos”.
El otro verdadero desafío son los principiantes, “cuando más del 80% de ellos ya no quieren esquiar después de intentarlo la primera vez”.
Respecto a la montaña “cuatro estaciones”, reconoce que “las inversiones que se hacen en invierno son tan enormes que es imposible imaginar hacer lo mismo en verano, de ahí la necesidad de aprovechar al máximo las instalaciones existentes durante todo el año. ¡No todo el mundo tiene la suerte de tener un restaurante de montaña o un Mont Blanc!”.
Actualmente existen 68 países en el mundo que ofrecen zonas de esquí al aire libre equipadas y cubiertas de nieve.
Aunque los campos de nieve son mucho más numerosos, en todo el mundo se han identificado unas 2.000 estaciones de esquí.
Además de los principales destinos de esquí en términos de visitas de esquiadores, hay otros destinos más pequeños en los que el esquí ha sido una industria durante mucho tiempo o está en desarrollo actualmente.
Los destinos emergentes más obvios son Europa del Este y China, pero hay otros pequeños actores repartidos por todo el mundo: Chipre, Grecia, India, Irán, Israel, Líbano, Lesotho, Marruecos, Nueva Zelanda, Pakistán, Sudáfrica. Turquía y muchos más.