El esquí divide a la familia Real

El esquí divide a la familia Real

La familia real en una imagen esquiando.

Sáb, 23/12/2023 - 10:55
La afición compartida por Leonor, Felipe VI y el emérito no gusta nada a la Reina Letizia.
Desde el pasado domingo, han circulado numerosas informaciones e imágenes de la cadete Leonor en el Pirineo aragonés, esquiando junto a sus compañeros cadetes y damas de segundo curso de la Academia General Militar (AGM) de Zaragoza, como parte de la instrucción militar de montaña que llevan a cabo cada año en el valle de Aragón.
 
Desde la escuela, se trasladan en autobús hasta la estación de Astún temprano por la mañana para tomar las clases de instrucción. Acompañados por profesores, los dividen en grupos y deben realizar diversas maniobras en la nieve con los esquís a cuestas.
 
Estas prácticas en la nieve forman parte de la instrucción castrense de la heredera y han coincidido con los días previos a la Navidad.
 
Una vez finalizada su estancia en el centro, la hija mayor de los Reyes, don Felipe y doña Letizia, volverá a Madrid para disfrutar de unas semanas de descanso en familia. No es la primera vez que la princesa Leonor visita esta estación de esquí.
 
 
En 2017, junto a Felipe, Letizia y su hermana Sofía, acudieron a la misma estación para disfrutar de una jornada deportiva.
 
Además, fue la primera vez que las hijas de los Reyes esquiaron en público, aunque en privado habían recibido clases particulares, por lo que pudieron demostrar su experiencia.
 
Un deporte que su padre, el rey Felipe VI, practica habitualmente, al igual que hacía su abuelo, el emérito Juan Carlos I, pero que, según los cronistas reales, no es del gusto de la reina Letizia. La visita al Pirineo Aragonés fue la primera y última vez que los cuatro acudieron a una pista de esquí, y en las siguientes ocasiones fue el rey quien acudió junto a amigos.
 
Felipe quiso introducir a su mujer en el mundo del esquí cuando empezaron su relación, hasta el punto de apuntarla a clases para que compartiera con él una de sus aficiones.
 
Antes de la boda, en el año 2004, doña Letizia estuvo en Baqueira y las imágenes de la entonces prometida del príncipe Felipe haciendo una cuña en una pista poco empinada se publicaron en todas partes. "Si me caigo, me sacaréis, ¿no?", expresó doña Letizia a la prensa en aquella primera vez a solas en la nieve con el entonces príncipe de Asturias. Más tarde, en 2005, volvió a Baqueira y fue la última vez que la vimos allí.
 
La prensa que los acompañó a Baqueira habría sido testigo de una escena que podría explicar su negativa a volver a la nieve, ya que aquel día ella les habría pedido que no publicaran fotografías de posibles caídas: "Dejarse caer por las montañas nevadas no es algo que le apasione".
 
 
En cambio, el Rey Felipe es un apasionado del esquí, un deporte que el monarca practica de manera regular, siempre que sus compromisos oficiales lo permiten.
 
De hecho, cada año es habitual que el jefe del Estado aproveche la temporada en la que las pistas están abiertas para hacer una escapada con amigos a alguna estación española.
 
Así, el pasado año estuvo en Baqueira Beret y en Sierra Nevada en dos de sus salidas privadas, pero suele acudir también a Astún y Candanchú, donde ha estado ahora su hija mayor. En todos estos viajes siempre le acompañan algunos amigos, entre los que se encuentran su primo Beltrán Gómez-Acebo o Pedro López-Quesada, marido de su prima Cristina de Borbón-Dos Sicilias.
 
La negativa a esquiar de la reina sorprende teniendo en cuenta que Letizia es una gran amante del deporte, tal como explican trabajadores de La Zarzuela: "Se levanta a las siete de la mañana y aprovecha para salir a correr por los jardines.
 
Cada mañana entrena en el gimnasio una hora bajo la supervisión de su entrenador personal, en sesiones en las que alterna ejercicios de fuerza con otras más aeróbicas".
 
También se ha publicado que sería una apasionada de la escalada y habría pedido que se construyera un pequeño rocódromo en casa. Entre las clases que realiza cada semana también hay boxeo, pilates y yoga.
 
Lo que queda claro es que si Letizia no quiere ir a esquiar, no va, y punto, mientras que la princesa Leonor y la infanta Sofía disfrutan en la nieve, algo que las une aún más a su padre, el Rey.
 
 
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