Stefan Luitz saldrá hoy del portillón de salida del gigante de Val d’Isère investigado por, presuntamente, violar las reglas antidopaje al inhalar oxígeno entre carreras en el slalom de Beaver Creek el pasado fin de semana, donde consiguió su primera victoria dentro del circuito blanco.

La pregunta que en estos momentos flota en el ambiente de la Copa del Mundo de esquí alpino es: ¿Se le quitará a Stefan Luitz su victoria en el gigante de Beaver Creek? Una foto que muestra al alemán inhalando oxígeno entre las dos carreras llevó al FIS a abrir una investigación. Esta práctica está prohibida desde 2016, tal y como se especifica en su regulación antidopaje.

El esquiador de Bolsterlang, de 26 años, había conseguido su primer triunfo en la Copa del Mundo en Colorado, en el que era su regreso a la competición después de una grave lesión.

Según distintas fuentes próximas a la FIS, el máximo organismo del esquí mundial,  habría recibido una protesta anónima después del gigante de Beaver Creek, que acusaba al esquiador teutón de haber usado botellas de oxígeno. Luitz habría inhalado entre las dos mangas, lo que le habría beneficiado teniendo en cuenta la altitud del resort estadounidense.

Esta práctica solo se permite en el entrenamiento, no durante las competiciones. Ahora la Agencia Mundial Antidopaje AMA decidirá sobre el asunto: podría descalificar a Luitz y, en ese caso, la victoria terminaría en manos de Marcel Hirscher, quien tocaría 60 victorias en el circuito máximo.

Por ahora, Luitz y los otros esquiadores alemanes, que también están involucrados en la investigación, no han sido suspendidos y podrán participar en el gigante de Val d’Isere de este sábado.