Aragón ha recibido 1,2 millones de esquiadores en 124 días de esquí la temporada 23-24
Candanchú, con 133.000 esquiadores, queda lejos de las cifras de temporadas anteriores.
Vie, 31/05/2024 - 10:00
La Comisión de Turismo y Medio Ambiente hace balance y analiza los resultados de las siete estaciones de esquí del Pirineo y Teruel, que han perdido 300.000 esquiadores.
La temporada de esquí 2023/2024 en Aragón ha cerrado con un balance agridulce, reflejando tanto los desafíos meteorológicos como la capacidad de adaptación del sector.
Las siete estaciones de esquí del Pirineo y Teruel registraron un total de 1,2 millones de esquiadores a lo largo de 124 días, una cifra significativa pero inferior a los 1,5 millones de la temporada anterior y muy lejos del récord de 1,7 millones alcanzado en 2021/2022.
La Comisión de Turismo y Medio Ambiente de Aragón analizó los resultados de la temporada, reconociendo un descenso de 300.000 esquiadores respecto al año pasado.
Raca y Pastores en Astún con Candanchú al fondo.
Según el director general de Turismo del Gobierno de Aragón, Jorge Moncada, este retroceso se debió principalmente a la llegada tardía de la nieve, un problema mitigado en parte gracias a la producción de nieve.
Moncada calificó la temporada como "satisfactoria" y destacó la "resiliencia absoluta" del sector, que a pesar de las condiciones adversas, logró mantener las estaciones abiertas y la economía local activa.
“La innivación nos ha permitido dar continuidad a la apertura de las estaciones hasta el siete de abril, con la producción de nieve sin aditivos, usando energías cien por cien verdes y agua que vuelve a la montaña”, afirmó Moncada.
Las estaciones de Aramón recibieron más de 800.000 visitantes, mientras que Astún y Candanchú acogieron a 267.000 y 133.000 esquiadores, respectivamente.
Aramón Cerler a inicios de abril presentó las mejores condiciones de toda la temporada. (Foto: Félix Martínez)
Estos números, aunque menores que en temporadas anteriores, muestran la efectividad de las inversiones en tecnologías de nieve producida para prolongar la temporada y garantizar la actividad económica en la región.
El diputado de Chunta Aragonesista, Joaquín Palacín, reconoció la importancia de la nieve artificial pero advirtió sobre los límites de este enfoque en el contexto del cambio climático. Palacín destacó que “no se puede esperar que se salve por la creación de nieve artificial” y llamó a explorar nuevas actividades y alternativas para mantener las estaciones operativas durante todo el año, como el ciclismo de montaña (BTT).
Desde otros grupos políticos, hubo también voces que resaltaron la necesidad de diversificación y sostenibilidad.
Antonio Romero, del Partido Popular, elogió el modelo pionero de Aramón que combina esquí con ocio y naturaleza, mientras que la socialista Leticia Soria cuestionó las medidas de desestacionalización y pidió un plan de acción ante la meteorología adversa.
Aramón Javalambre en Teruel
A pesar de las dificultades, el sector del esquí sigue siendo un motor económico crucial para Aragón, representando el 7% del PIB regional y generando 1.100 empleos directos cada temporada, además de más de 11.000 empleos indirectos.
El debate sobre el futuro del esquí en Aragón se centra en cómo adaptarse a los cambios climáticos y económicos. Moncada mencionó la necesidad de continuar con las inversiones en digitalización y tecnologías IoT (Internet de las cosas) para mejorar la gestión de las estaciones y optimizar recursos.
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