La estación está ubicada en el Valle de Boí, en la Alta Ribagorça, Lleida, y cuenta con las cotas más altas esquiables del Pirineo, con una base a 2.020 metros sobre el nivel del mar en Pla de Vaques y la más alta a 2.751 metros en Puigfalcó o Cap de les Raspes Roies, con orientación norte. Además, limita con el Parque Nacional de Aigüestortes y Llac de Sant Maurici.

 

 

Hemos tenido la oportunidad de visitarla en varias ocasiones durante el 2024 y nos gustaría compartir nuestras experiencias. Es una estación sumamente cómoda y accesible, ya que desde la base tenemos acceso a todos los sectores, un aspecto ideal para familas y niños al tener un único punto de encuentro final. Al recorrerla de izquierda a derecha, encontramos:

 

 

El Telesilla Vaques nos lleva al Pic de la Pala Ginebrell. En esta área se encuentran las pistas certificadas para competición, además de dos pistas negras. Vale la pena destacar la nueva pista Ginebrell, que ahora permite descender hasta la base por una pista azul, lo cual antes era imposible. Más a la izquierda de esta pista, nos encontramos con el itinerario freeride del mismo nombre, que conduce al parking superior de la estación.

 

 

El Telesilla Mulleres y el Telesilla Junior nos proporcionan acceso a la mayoría de las pistas verdes y azules, ideales para principiantes. También nos permiten acceder al Snowpark Basseta, que cuenta con su propio arrastre.

 

 

El Telesilla Resort Express nos lleva al Blacó del Cerví, a 2.520 m de altitud. Desde allí, tenemos acceso a pistas azules, rojas y negras.

 

Destacamos la nueva pista Regalessia, que permite un descenso en pista azul desde la zona del Boulevard, antes solo accesible para expertos a través de la pista negra La Pala. Esta área es ideal para el esquí fuera de pista controlado. En la base de este telesilla Express, encontramos la zona infantil, con el parque de nieve para los más pequeños y dos cintas transportadoras para ellos.

 

 

El Telesilla Roies y el Telesquí Puigfalcó nos proporcionan acceso a la zona del Coll de Roies, a 2.540 m de altitud, y al Puigfalcó, a 2.751 m. Esta área es conocida por sus pistas rojas y negras, así como por ofrecer la oportunidad de esquiar fuera de pista.

 

El reciente cambio del telesilla por el arrastre ha sido una decisión acertada, ya que no solo nos brinda acceso a la pista Vista Pallars, sino también a la pista Vista Aran Collbirros, una pista-itinerario de gran belleza y el punto de partida de excelentes itinerarios freeride. Además el nuevo remonte resiste rachas de viento más intensas sin dejar de prestar servicio. El antiguo telesilla estaba cerrado muchos días durante la temporada por viento.

 

 

 

La estación cuenta con un estadio de competición en la zona de Vaques, y ofrece 4 itinerarios para skimo de diferentes niveles: desde fáciles como el Ginebrell, pasando por opciones de dificultad media como el Port d'Erta, hasta los más desafiantes como el que lleva al Coll de Roies o a Puigfalcó para expertos.

 

También dispone de una pista de trineos, una zona de freestyle & snowpark Basseta con su propio arrastre, y por último, una amplia área infantil con su parque de nieve y dos cintas especiales para los más pequeños.

 

 

En verano, se pueden encontrar rutas de senderismo y de e-bikes, además de la instalación de una nueva tirolina, que será la más larga del estado, extendiéndose desde la base de la estación hasta varios kilómetros más abajo (actualmente en construcción). También es una buena puerta de entrada al Parque Nacional.

 

 

 

Podemos afirmar que en la Vall de Boí se concentra el mayor conjunto de arte románico del Pirineo. No en vano, fue catalogado como Patrimonio Mundial por la UNESCO.

 

Además, en 2023 se celebraron los 900 años de la consagración de las icónicas iglesias de Sant Climent y Santa Maria de Taüll en la Vall de Boí. Tanto una como la otra son consideradas como dos de las obras más emblemáticas del Románico catalán, tanto en la arquitectura como en las pinturas murales.
 

En pocos kilómetros encontramos hasta 9 iglesias románicas de una belleza incalculable. Además de la más visitada, Sant Climent de Taüll, existen otras igualmente hermosas o incluso más, como Santa Eulalia de Erill la Vall, Sant Joan de Boí, Sant Feliu de Barruera, Natividad de Durro, Santa Maria de Cardet, Assumpció de Coll, Sant Quiric de Durro, o en el mismo pueblo de Taüll, aparte de Sant Climent, está Santa Maria.

 

De estas visitas, no podemos perdernos el Video Mapping de Sant Climent de Taüll o el Centro de Interpretación del Románico en Erill la Vall.

Las iglesias están abiertas para visitas todos los días del año, excepto el 01/01, 25/12 y 10/04 (por la tarde). Los horarios son de 10 a 14 h y de 16 a 19 h. El precio de las entradas es de 5 euros para Sant Climent de Taüll, que incluye el video mapping; para el resto de las iglesias, el precio es de 2 euros.

 

También existen dos opciones de entrada conjunta: una para 3 iglesias por 7 euros y otra para 5 iglesias por 10 euros. La entrada a la iglesia de Santa Maria de Taüll es gratuita, al igual que para los menores de hasta 10 años.

 

Actualmente se está celebrando los 900 años de consagración de las iglesias de Sant Climent y Santa Maria de Taüll. Y por ello se están realizando una serie de actividades.

 

Además del arte románico, el Valle de Boí también nos ofrece una propuesta gastronómica de primer nivel, tanto en la propia estación como en todos los restaurantes del valle.

 

 

 

 

• Cabe destacar la pavimentación del parking, una mejora reclamada desde hace décadas por los usuarios, que sufrían un parking lleno de barro.
• La sustitución del telesilla de Puigfalco por un telearrastre. Antes, para acceder a Puig Falcó 2.751 msm, se debía tomar un telesilla que, al estar muy expuesto al viento, provocaba que durante la temporada de esquí estuviera abierto pocos días al público. Con el arrastre se elimina esta problemática y se hace accesible esta zona de la estación.
• Se ha implementado un nuevo servicio de alquiler, con la construcción de un nuevo espacio, espacioso y moderno, en la entrada de la estación.
• Se han mejorado y renovado los servicios de restauración, incluyendo nuevas terrazas exteriores.

 

En definitiva, ya sea para los esquiadores expertos que buscan pistas rojas bien pisadas, para el esquí familiar que permite disfrutar a los más pequeños, o incluso para los no esquiadores con las visitas al románico, es una salida imprescindible que todos deberíamos realizar.
 

 

Más información sobre la estación de Boí-Taüll y todos los detalles sobre el Románico.