Ucrania puede estar inmersa en una guerra con Rusia, pero eso no ha impedido que las autoridades aspiren a atraer turistas.

 

A cientos de kilómetros del frente de batalla, en el oeste del país, se están elaborando planes para una mega área de esquí, la más grande de Ucrania, con capacidad para 65.000 visitantes y dividida en cuatro estaciones.

 

La idea del complejo de esquí se dio a conocer por primera vez en 2016, pero desde la guerra se ha expandido silenciosamente a planes para tres centros turísticos, en un área no muy lejos de la frontera con Rumanía y fuera del alcance de Rusia.

 

 

Sin embargo, un grupo ecologista advierte que el desarrollo en el macizo de Svydovets, con alrededor de 60 hoteles, 120 restaurantes, cientos de cabañas y más de 225 kilómetros de nuevas pistas, arruinará una región conocida por su biodiversidad, con al menos 93 especies en peligro de extinción, incluidos osos y linces.

 

Free Svydovets teme que el proyecto también ponga a las aldeas en riesgo de inundaciones catastróficas al acelerar la deforestación y ha llevado el proyecto a la Corte Suprema y al Parlamento Europeo, que ya ha calificado de ilegales los planes para un lugar de deportes de invierno en Svydovets.

 

 

Los tres estarían vinculados con la estación de esquí ya existente en Bukovel. Entre las cuatro podrían albergar a 65.000 turistas.

 

Es un reto del presidente Zelensky, que espera organizar algún día los Juegos Olímpicos de invierno, para lo cual se necesitarán muchas más estaciones de esquí.