El valor del índice es negativo en estos momentos y venimos de un mes de febrero con valores muy positivos. Este hecho se hace patente con la llegada actual de diversas borrascas que han roto la tendencia anticiclónica.

 

A partir de ahora y en adelante hay una clara dispersión el índice tiene dispersión en su tendencia. Por una parte, eso es bueno, pues aunque podríamos pasar que la tendencia volviera a ser positiva también hay suficientes indicios para lo contrario. Así nos vamos a plantar a mediados de marzo con el paso de varias borrascas por la Península Ibérica y por lo tanto, con nevadas no muy importantes, pero que irán sumando cms o litros.  

 

 

Pasamos al índice NAO (Oscilación del Atlántico Norte), este es mucho más claro y aunque sigue positivo se acerca hacia la neutralidad e incluso con tendencia a continuar así.

 

Las diversas proyecciones se ponen de acuerdo en este aspecto para los próximos días. Con todo esto también soy optimista con la visión de estos dos índices, no son del todo desfavorables e indican la llegada de borrascas durante los próximos 15 días.  

 

 

Ahora es el turno de mirar que nos dicen los modelos a más largo plazo. Veamos que nos espera desde este punto de vista para los meses de marzo y abril, el mes en el que terminaremos la temporada. 

 

Primero veamos el modelo CFSv2 en cuanto a las temperaturas previstas para este mes de marzo. La buena noticia es que las cordilleras de la Península Ibérica estarán en la mediana con anomalías positivas pero muy ligeras o en la media histórica (color blanco).

 

Por lo que respecta a las precipitaciones para este mes de marzo vemos que la zona este del Pirineo y el sur de la cordillera Ibérica está en la medida de precipitaciones en cambio, en el centro y norte la precipitación estará muy por debajo de lo que debería.

 

De lo que deducimos la formación de algunas borrascas el Mediterráneo y nevadas en este sector Pirenaico. 

 

Ahora analizaremos también, el modelo Copernicus de temperaturas basado en el ECMWF.  Para el mes de marzo la temperatura estaría algo por encima de lo habitual en general en todas las cordilleras, por lo tanto, discrepa algo con el anterior modelo. 

 

 

Respecto a las precipitaciones para marzo según el Copernicus, estas coinciden con el anterior modelo, en el caso del Mediterráneo por la formación de bajas afectando al este del Pirineo y también la cordillera ibérica. En cambio, según el modelo, en la cara norte del Pirineo, centro y cantábrico las precipitaciones serian hasta un 40 % inferiores a las normales. 

 

 

Vamos más allá. Veamos el mes de abril, y como va a evolucionar dando solo una pincelada. 

 

Según el modelo Copernicus precipitaciones para abril, la tendencia indica de nuevo precipitaciones abundantes en el área mediterránea y cara sur del Pirineo. En el resto estarán por debajo de lo que tocaría. Las temperaturas continuaran siendo algo más elevadas.  

 

 

 

Por último, vamos a mirar el modelo ECMWF a muchas horas vistas. Lo que nos da una buena sorpresa al posicionarse un antilón de bloqueo en el norte de Europa a finales de la próxima semana, sabemos que su fiabilidad es muy limitada, pero esto sginificaría la obligada llegada de borrascas a nuestras latitudes debido a la imposibilidad de pasar por sus "rutas" habituales más al norte.

Mapa ECMWF a 210 horas con el anticiclón de bloque posicionado encima de Escandinavia, lo que provocaría una buena autopista para las perturbaciones directa a España. Son muchas horas y hay que tomarlo con calma. Fuente Meteociel

En conclusión

Viendo los modelos y los índices para marzo y abril, el cambio de tendencia está aquí. Pensamos que podemos ver una reactivación de las precipitaciones en la Península con lluvias y nevadas en cotas medias (1.500m aprox), aceptables para la época del año. Nos visitarán algunas borrascas y algunas pueden generosas en sus precipitaciones.
 

Josep Tomàs