Hoy estamos la mayoría de los participantes/organizadores agotados pero contentos en nuestras oficinas o en casa (algunos disfrutamos de fiesta este lunes) pensando en la Quedada Esquí recién finalizada y haciendo balance de la misma.

Nuestro cuartel principal en la cafetería Merlans.

La verdad es que antes de ir no podía dejar de pensar en esos horribles mapas del tiempo que había colgado nuestro experto Barrufa y que no auguraban nada bueno para la Quedada en Saint-Lary...
Lluvia, mucha lluvia es lo que nos vaticinó Barrufa, y por una vez no acertó del todo, llovió un poco en las cotas bajas el jueves Santo, hizo buen día el viernes, mal tiempo el sábado 30 de marzo, día en el que nevó unos 10 cm a primera hora, pero a partir de media mañana empezó a soplar un fuerte viento que afectó a varias de las actividades previstas, como a la carrera de slalom que pudo disputarse finalmente, a la exhibición de saltos que no pudo desarrollarse así como la barbacoa que tuvo que suspenderse.

Vista del valle y de la zona de la estación Pla d'Adet.

Pero el domingo compensó totalmente ese duro sábado con una nieve perfecta, una capa del blanco elemento recién caída nos esperaba, así como unas temperaturas más bajas y un día despejado y radiante sin viento, realmente fue el broche de oro para esta Quedada y la magnífica estación de Saint-Lary Soulan.

Nacho Galán en acción del equipo de Lugares de Nieve, ganador del primer premio del Slalom para menores de 16 años.

Casi 500 esquiadores o snowboarders de toda la península hemos estado esta Semana Santa en Saint-Lary, lo que significa que se ha duplicado la asistencia de la primera Quedada desarrollada el año pasado.

Se ha disputado diversas actividades con buena participación, como la carrera Slalom o la Gincana popular, se ha tenido que suspender la Barbacoa o la exhibición de saltos Free-Style debido al fuerte viento y finalmente ha sido un éxito la fiesta de entrega de premios y clausura el sábado noche en Saint-Lary.

Todo perfectamente organizado por Evolución Viajes con unos buenos apartamentos, una estación de esquí y pueblo que ha abierto totalmente sus puertas a la Quedada. Como nota negativa, la meteorología que ha deslucido alguna de las actividades.

Bravo por Saint-Lary y un aplauso a todos los participantes a la Quedada por el buen rollo y mejor ambiente.

Hasta el próximo año.