Mientras aquí los termómetros marcan más de 30 grados, en Estados Unidos y Canadá se da una fuerte ola de calor, y en China y Alemania caen diluvios, Brasil y Argentina atraviesan una ola de frío sin precedentes -que sin embargo no llega a todas las estaciones de esquí de la Patagonia-.

 

En 48 ciudades de Santa Catarina, Paraná y Río Grande del Sur, estado fronterizo de Brasil cercano a Argentina y Uruguay, los valores bajo cero y las nevadas -incluso copiosas- se han convertido en los protagonistas de la semana.

 

 

Según datos del Servicio Meteorológico de Brasil MetSul, Rio Grande do Sul tuvo este viernes el amanecer más frío del año con un mínimo de -7,2 °C en Vacaria y la mayoría de las 497 ciudades del estado registraron un mínimo bajo cero.

 

Aunque las temperaturas más llamativas se están dando en la vecina Argentina. Hasta el momento, se han registrado récords de bajas temperaturas en tres localidades de Formosa, Chaco y Corrientes, según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) argentino.

 

"El clima frío es el resultado de la tercera masa helada que viene de los mares subantárticos a Brasil este invierno. En gran parte del país, la jornada fue helada, registrándose las temperaturas más bajas del año en varias ciudades en medio de una intensa ola de frío ya pronosticada por los servicios meteorológicos", ha explicado el diario brasileño O Globo.

 

 

Las bajas temperaturas durarán hasta el comienzo de agosto, después es previsible que las máximas vuelvan a superar los 35 grados de máxima nuevamente (entre el martes y el miércoles próximos) a medida que el aire frío se aleja.

 

 

 

La ola de fríos está afectando de for;a desigual a las estaciones de esquí de la Patagonia. Mientras algunas de ellas, como Las Leñas (Mendoza) o Catedral Alta Patagonia (RÍo Negro) han recibido apenas nieve el mes de julio y registran altas temperaturas, en Cerro Castor (Ushuaia), las nevadas ha dejado unas condiciones excelentes para el esquí.