Sin embargo, esta semana se han detectado en las pistas leoneses esquiadores procedentes de otras provincias, comunidades autónomas e incluso de otros países, en concreto de Portugal.

 

Lo reconoce la propia Diputación de León, titular de ambas estaciones de esquí, que en su última sesión plenaria ha reconocido que este incumplimiento “ha causado incluso puntuales problemas de exceso de asistentes tanto en San Isidro como en Valle de Laciana-Leitariegos en momentos muy puntuales de las últimas semanas”.

 

A pesar de ello, el ente provincial considera que “la vigilancia en las zonas limitantes del cierre perimetral son suficientes” y que “la clave está en la responsabilidad de cada uno”.

 

El diputado por la Montaña Oriental Leonesa, Nicanor Sen, quiso destacar la Diputación "ha sido de las primeras en España" en instaurar los protocolos sanitarios y de seguridad, distancias y aforos en ambas estaciones invernales. Sin embargo, admitió que "ha resultado muy difícil cumplir ciertos criterios porque han venido incluso de otros países y otras comunidades".

 

El problema es que la Diputación no tiene competencias para vigilar, ni sancionar, a quienes se salten esas restricciones, algo que les corresponde a las fuerzas y cuerpos seguridad del Estado. Por ello, reclama que "se tiene que hacer en origen, ya que hacerlo en las estaciones es imposible".

 

Lo que sí puede intentar el organismo provincial y dice que lo va a hacer, "en breve tiempo", es mejorar el sistema de venta y control de forfaits para intentar que, los que no son de León, puedan comprar un pase para ir a esquiar.

 

Mientras, este fin de semana San Isidro sigue abierta con 11 pistas y 9 kilómetros esquiables, mientras que Valle de Laciana Leitariegos permanece cerrada.