Se acerca el ecuador de la temporada de invierno 2019-2020 y los equipos de explotación de Grandvalira siguen trabajado intensamente para mantener abierta la casi totalidad de los 210 kilómetros de pistas y unos espesores que, tras las nevadas de hace dos semanas que dejaron más de un metro de nieve, oscilan entre los 80 y los 160 centímetros. Las previsiones para los próximos días son de buen tiempo y alguna precipitación débil puntual, por lo que la estación llega a febrero a pleno rendimiento en servicios y actividades, y con las mejores condiciones. Toda una garantía de plena diversión sin límites para todos los miembros de la familia en un mes marcado por celebraciones especiales como San Valentín o las fiestas de Carnaval.

 

 

Grandvalira es un paraíso natural de montaña ideal para familias, con un sinfín de servicios y actividades para todas las edades. Con el objetivo de que los niños disfruten igual o incluso más que los adultos, la estación dispone de 4 guarderías para los más pequeños de la familia en los sectores de Canillo, El Tarter, Soldeu y Grau Roig. Los niños de 3 a 6 años pueden descubrir el mundo de la nieve y del esquí entre las múltiples propuestas que ofrece la Escuela de Esquí y Snowboard de Grandvalira como el jardín de nieve, el nuevo Kids Program o la novedosa metodología de enseñanza Burton Riglet, que permite aprender snowboard desde los 3 años. Además, en la estación más grande del sur de Europa también hay circuitos de esquí infantil hasta los 12 años: el Mon(t) Magic del sector Canillo, con la pista temática más larga del sur de Europa, el Kid Forest en el de la Casa, Grau Roig y Encamp, el circuito Bababoom Circus de El Tarter y el circuito Yokai de Soldeu.

 

Como propuesta complementaria para los adultos, los centros de cada uno de los 7 sectores de la Escuela de Esquí y Snowboard ofrecen clases particulares o colectivas en seis idiomas para todas las edades y niveles, así como de otras formaciones más exclusivas como la Top Class.

 

 

Más allá del esquí, en Grandvalira hay una multitud de actividades originales y divertidas que se pueden vivir en familia, pero también solo, con amigos o en pareja. Es el caso del Snake Gliss en el sector Soldeu, un conjunto de trineos articulados que simulan una serpiente; en Canillo se puede disfrutar del tobogán alpino de 555 metros Magic Gliss o la tirolina, que permite llegar a los 80 km/h; en el Grandvalira Adventure Center de El Tarter se propone practicar heliesquí, freeride, raquetas o esquí de montaña y en el Grandvalira Mountain Park de Grau Roig se puede disfrutar de la construcción de iglús, las motos de nieve o el mushing.

 

 

 

Grandvalira es una de las estaciones de los Pirineos en la que se puede continuar esquiando dentro de su dominio esquiable cuando ya ha cerrado sus puertas. Esto es posible en la pista de la Solana/Tubs, apta para todos los públicos y que está ubicada a pie de pistas del sector Pas de la Casa. Esta pista se ilumina de noche y abre el telesilla los jueves y los sábados de 17h a 20h, siempre y cuando las condiciones meteorológicas lo permitan.

 

Además, una temporada más, el Sunset Park Peretol by Henrik Harlaut (sector Grau Roig) vuelve a ser un punto de encuentro clave para los amantes del freestyle de los martes a domingos, con el distintivo de ser el único en el Pirineo nocturno que abre hasta las 21h.

 

 

Grandvalira cuenta con más de 60 puntos de restauración, todos operativos y distribuidos por todo el dominio, con una amplia oferta gastronómica que se adapta a todos los gustos y necesidades. Restaurantes como el Wine & Meat Bar by Jean Leon (sector Soldeu), la Arrosseria Pi del Migdia y La Trattoria (El Tarter), la Brasería Piolet, el 3 Estanys y el Refugi del Llac de Pessons (Grau Roig), el Racó de Solanelles y el AndBurguer (Encamp) o el Roc de les Bruixes (Canillo) garantizan que comer a 2.000 metros de altura sea una experiencia inolvidable.

 

 

 

El après-ski en Grandvalira ya es un referente en la Península y todo un reclamo para público de todas las edades. La estación cuenta con una amplia oferta de bares y terrazas al más puro estilo alpino, el lugar perfecto para hacer una parada durante la jornada o para darla por finalizada de una forma relajada y divertida: IQOS en El Tarter y su terraza lounge con hamacas, Amélie Experience en el Llac de Pessons y su barra exclusiva con ostras de calidad, Cala Bassa Beach Club Costa Rodona en el Pas de la Casa con la esencia de Ibiza en plena estación de esquí, Veuve Cliquot en Soldeu con su espacio exclusivo y los dos puntos por excelencia del après-ski en Andorra: L’Abarset y Après-Amélie.

 

L’Abarset tiene preparada una nueva actuación el próximo sábado 8 de febrero con el DJ Marko Nastic para finalizar la jornada de esquí con la mejor música en el emblemático establecimiento de El Tarter.

El Après-Amélie del Funicamp contará con Mario J para la sesión El Tonteo del viernes 7, al día siguiente sábado 8 actuarán Kurt Heisz, India y Manu Chaile en la sesión House of Madness y el domingo 9, para redondear el fin de semana, fiesta del Dollar The Club en la sesión tarde.

 

 

 

Esta temporada, Grandvalira presenta, de la mano de Epic Andorra, experiencias premium que ofrecen la posibilidad de redondear el día durmiendo en bordas (construcciones típicas andorranas), domos calientes o cabañas, rodeados de pura naturaleza y bajo un manto de estrellas. Las experiencias se acompañan con actividades al aire libre y degustaciones gastronómicas con productos autóctonos, y permiten ser el primero en esquiar al día siguiente en las pistas, de la mano de un monitor Top Class.

 

 

Ordino Arcalís mantiene el 100% de las pistas e instalaciones abiertas, con cotas que van de los 110 a los 180 cm de nieve dura. El descenso y normalización de las temperaturas ha permitido a los equipos de terreno avanzar en las tareas de innivación con los cañones. La estación mantiene todas las actividades y restaurantes abiertos, la pista de trineos en la Coma y el circuito infantil.