Está situado en el sector Grau Roig de Grandvalira, junto al magnífico punto de restauración del Piolet, al lado justo del telesquí del Montmalús. El nuevo Vodka Bar es el punto de parada más exclusivo para aquellos esquiadores o grupos Top Class que quieran descansar en un lugar inédito, a 2.150 metros de altitud y acompañados de un buen cóctel. Sitio innovador e insólito, donde el paisaje y el cálido ambiente acogedor son los protagonistas. Dispone de una amplia selección de cócteles y bebidas y de un menú único con productos selectos y de gran calidad.

Después de una interesante comida en el punto de restauración del Piolet, nos dirigimos al Vodka Bar, el cual conocíamos por el dossier de prensa de Grandvalira que nos había llegado hacia días.

Al principio no lo encontrábamos...¿Será aquí? nos preguntábamos mi compañero y yo, ¿no nos habremos equivocado? pensábamos... no nos equivocamos, al final lo encontramos. Se accede al Vodka Bar desde El Piolet pasando por el pequeño puente por donde discurre la pista de acceso al telesquí del Montmalús, justo pasado el puente, queda a la derecha del remonte un poco apartado o escondido.

Era pronto, aproximadamente las 15.30 h de la tarde, llegamos y abrimos con timidez la gran puerta roja de la entrada. Dentro todo cambió, nos quedamos alucinados con la magnífica e impecable decoración que tenia el nuevo local, hasta el más mínimo detalle estaba cuidado. Una suave y agradable música se percibía, el local estaba casi vacío pues era pronto y además temporada baja... Una amable chica nos sonrió desde la barra, nos acercamos y nos presentamos, ella nos explico la idea o concepto del local; un local dirigido a las personas adultas, los niños no pueden entrar, donde se sirven las mejores ginebras, vodkas y otros licores del mercado, con unas copas de cristal de lujo, todo con muy buena pinta. Preguntamos los precios y el gin-tonic de ginebra buena oscila entre los 15/18 euros aproximadamente. La verdad, todo tenáa muy buena pinta, confortable y lujoso.

Nos comentó que el horario es de 13 h a 17 h, está pensado sobre todo para el turista -especialmente ruso- con poder adquisitivo y que busque algo diferente después de la jornada de esquí, un servicio impecable y unos sofás conforman un chill-out brutal en la parte de arriba. Los que busquen marcha estilo Austria o Suiza no la encontraran, el volumen de la música es muy suave, no hay multitudes ni se pretende que la gente baile encima de las mesas. Este local busca la relajación y el disfrute de sus clientes. Posteriormente cabe recordar que se puede volver esquiando hasta la base de Grau Roig a través de un camino que parte del telesquí del Montmalús (ojo con pasarse con el vodka ya que hay que remar un poquito...).

También existe la posibilidad de hacer cáterings para grupos de mínimo 10 personas, tanto comidas como cenas, con la posibilidad de acceder al mismo con motos de nieve, raquetas o Múshing, haciendo de ello un complemento de aventura a una cena diferente. 

Bueno, esto fue una primera toma de contacto, prometimos volver y no tardaremos en hacerlo. ¿Triunfará? Esperemos que sí, a nosotros nos encantó. Grandvalira está haciendo un esfuerzo de mejora y diversificación de su oferta, apostando por la calidad, esto que parece un eslogan es cierto, pues llevamos muchos años visitando la estación y la mejora de la calidad de los sevicios de la misma es evidente. Por lo demás creo que dependerá del turista extranjero, ya que el español, el francés y el andorrano no tengo muy claro que se aficione al Vodka Bar por diferentes motivos, como el hecho de tomar copas a las 16 h de la tarde ó el precio de las mismas, en nuestro país la gente está habituada a salir de noche...y cambiar esto costará.

Ficha:

Restaurante: VodkaBar

Sector: Grau Roig

Tipo de cocina: Delicatessen y Coctelería

Horario: de 13h a 17h

Nocturno: con reserva y un mínimo de 10 personas. Paquetes cena + actividad (Raquetas, Múshing y Motos de nieve)

Reservas: (+376) 340043

Otro servicios: Coctelería