Cuatro rescates en un sólo fin de semana y numerosos y graves accidentes desde que ha empezado el verano en el Pirineo aragonés. La montaña está más peligrosa de lo que suele ser habitual en esta época del año. Así lo asegura la Guardia Civil, que alerta que las condiciones de las montañas del Pirineo aragonés y de los barrancos de las sierras revisten este verano una inusual peligrosidad para los aficionados a las actividades al aire libre debido a las intensas nevadas del invierno y las lluvias torrenciales de la primavera.

 

En una entrevista a Efe de la que se hacen eco varios medios como El Periódico, el Heraldo o 20 Minutos, el teniente jefe de los grupos de rescate de la Guardia Civil en la provincia de Huesca, Santiago Gómez, asegura que la montaña está "bastante más peligrosa de lo normal para esta época del año", especialmente en zonas de media y alta montaña donde los neveros son una trampa, a veces fatal, para las personas que carecen de preparación y de material adecuado para afrontarlos.

 

 

Gómez recomienda insistentemente no pisar los neveros si no se va equipado con el material adecuado -casco, piolet y crampones- y es que, como él mismo reconoce, hay personas que tratan de subir al Monte Perdido, un "tres mil", con unas simples zapatillas. 

A lo largo de los rescates que acumula, explica que se ha encontrado de todo, "desde gente que hace las cosas bien y aún así tiene accidentes, porque la montaña es una zona hostil para todos, hasta otro tipo de gente que cometen muchas imprudencias, tanto en cuanto al material necesario como en la planificación".

 

No sólo hay que llevar el material, sino que hay que saber utilizarlo. "Muchos, cuando van al Aneto, es la primera vez que usan el piolet y los crampones, y eso no debería de ser", por lo que recomienda recurrir a los clubes de montaña para hacer cursos de formación.

 

La Guardia Civil también lanza un mensaje a las empresas de aventura para que verifiquen que todos los guías que contratan tengan la titulación correcta, que informen a los usuarios de los peligros que conlleva una actividad y se preocupen del grado de conocimiento del material que se les proporciona.