Así lo han transmitido a los propios directivos del gran dominio andorrano, en una reunión mantenida el lunes, 14 de mayo. Según publica el medio andorrano Ara.ad, en este encuentro entre representantes de agencias y responsables de la actual Grandvalira, preguntaron sobre el futuro de la estación, teniendo en cuenta que la turoperación internacional y los contratos para la temporada 2019-2020 (la actual ya hace tiempo que está en marcha) y se han de activar "en breve", así como las campañas de promoción y marketing.

 

Pero no obtuvieron una respuesta concreta, han explicado, y "a estas alturas las cosas siguen tal como todo el mundo sabe" y sin evolución. Únicamente fueron informados de que las negociaciones entre las sociedades que conforman Grandvalira de cara a un desenlace no se han detenido. En principio, según se ha afirmado públicamente desde el dominio en varias ocasiones, la marca Grandvalira no debería variar la próxima temporada, y los cambios se deberían ver precisamente la temporada 2019-2020.

 

Fuentes del AAVA han alertado de que esta incertidumbre y, especialmente la rotura de la marca en dos sectores separados hará perder muchos turistas y se perderá en general atractivo en el posicionamiento de Andorra como destino de nieve. "Complica el día a día, el trabajo de captación de visitantes" , porque "se deberán vender de otro modo las pistas de esquí" , han expuesto. De hecho, ya están constatando la incertidumbre de sus clientes sobre un posible desenlace no satisfactorio.

 

Por todo ello, desde la asociación se apuesta por "un plan de continuidad", que sería beneficioso para todos, han defendido. A su juicio, habría que mantener la marca, "ya consolidada" y "presente en todos los contactos y contratos con nuestros clientes internacionales", independientemente de si después hay separaciones internas o modificaciones de funcionamiento entre las dos estaciones.

Fuente: Ara.ad