“Super Jules” deja el circo blanco a sus 33 años. El persistente dolor que sufre en su cadera derecha es el motivo del adiós de la esquiadora estadounidense más condecorada en las Olimpiadas. 

 

Como en todas sus carreras, la despedida de la cuatro veces medallista olímpica Julia Mancuso no ha podido ser más espectacular: un descenso por la pista “Olympia delle Tofane” de Cortina d'Ampezzo -la primera que le vio subirse a un podio en 2006- vestida con un traje de Mujer Maravilla y una capa roja atada al cuello. A la meta, le esperaba Lindsey Vonn y otros compañeros del team USA que la rociaron con champagne.

 

Después de una carrera de más de 18 años, Mancuso no consiguió clasificarse para los Juegos Pyeongchang del próximo mes de febrero, pero aun así irá a Corea del Sur como parte del equipo de transmisión de NBC.

 

Mancuso ha luchado contra los problemas de cadera a lo largo de toda su carrera y se perdió dos temporadas completas después de la cirugía a la que se sometió al finalizar la 2014-15. “Super Jules” regresó a la competición el mes pasado, pero sólo completó tres carreras, terminando fuera del top 30 en cada ocasión.

 

 

"Siempre ha sido algo que se avecina en el fondo de mi mente: cuál sería mi límite para decidir realmente", dijo Mancuso. "Tenía muchas ganas de venir aquí y demostrar que tenía lo que se necesitaba para formar el equipo combinado para los Juegos Olímpicos. Todo sucedió muy rápido. Después del entrenamiento comprendí que iba a ser demasiado difícil para mi cuerpo", añadió.

 

Julia Mancuso fue oro en el slalom gigante en los Juegos de Turín 2006, plata en descenso y en la combinada en los Juegos de Vancouver 2010 y bronce en los Juegos de Sochi 2014, una hazaña que la convierte en la esquiadora estadounidense más condecorada de la historia olímpica.

Apodada "Super Jules" y con una vestimenta de superhéroe a menudo deportiva, Mancuso dirigió una carrera poco convencional y divertida, dividiendo su tiempo entre surfear en Maui y viajar por el mundo persiguiendo la nieve en el invierno. Para Mancuso, sin embargo, no sólo se trataba de competir en las pistas. En 2010, demostró al mundo que era una de las esquiadoras más completas y talentosas, obteniendo un tercero en el Extreme Verbier Freeride. 

 

Mancuso espera el próximo capítulo de su carrera, donde se unirá al equipo de los Juegos Olímpicos de NBC en PyeongChang. Contribuirá con características en una variedad de plataformas, incluida The Olympic Zone, un programa nocturno de 30 minutos que se transmite por los afiliados de NBC, y también servirá como reportera. Mancuso ya trabajó para NBC en un puesto similar en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.