Era lunes por la mañana a las 9:30 horas, una avalancha en la zona fuera de pista de Tovière (Tignes) dejó cuatro muertos, un monitor y tres personas de una misma familia. Cuatro snowboarders fueron barridos por la lengua de nieve mientras cruzaban a pie llevando sus tablas de snowboard en la mano, para llegar a la zona en la que comenzarían su descenso fuera pistas. Una bajada que ya habían hecho una vez por la mañana sin ningún problema.
 

El lunes, en Tignes, el riesgo de avalanchas era 3/5
 

El peligro de avalancha varía en función del grado de exposición y la nieve de cada pendiente

El riesgo de avalanchas era 3/5 de ese día. Sin embargo, esta escala es a menudo malinterpretada por los esquiadores y snowboarders se lamenta Daniel Goetz, un ingeniero en el Centro de Estudios de la nieve de Grenoble. "La escala de riesgo de avalancha no marca o indica el riesgo de la intensidad de la avalancha, sino la probabilidad de que esto ocurra”, pero esta probabilidad varía en función de las pistas, su orientación, el grado de su exposición y su nieve explica.

"El mes de diciembre fue muy escaso en precipitaciones después de una fuerte nevada en noviembre. Y la nieve se convirtió en nieve poco cohesionada que acaba formando la denominada capa frágil".

Sin embargo, estas capas frágiles no son homogéneas, es decir, que "en todas las áreas expuestas al viento, la nieve ha sido compactada por el viento. Y, a la inversa, en lugares protegidos, ella se ha podido debilitar" continúa explicando Daniel Goetz.
 

Escala Europea de Peligro de Aludes

(*) Pendientes particularmente propicios en cuanto a la inclinación, configuración del terreno, proximidad de la cresta, rugosidad del suelo,…
(**) Las características de estos pendientes están generalmente descritas de forma más detallada en el boletín de aludes (altitud, exposición, topografía, etc.).
(***) Sobrecarga: – fuerte: p.e. un grupo de esquiadores; – Débil: p.e. un esquiador, un excursionista,…
– Caída espontánea: avalancha de causa natural, sin intervención humana.
– Desencadenamiento accidental: alud provocado, con intervención humana.

Capacidad para identificar las laderas peligrosas

"Este peculiar inicio de invierno hace que las placas que se han formado en enero y principios de febrero reposan sobre una base, en ciertos lugares, de nieve compactada por el viento, en este caso es estable. Pero en otros lugares, dichas placas se apoyan en capas frágiles provocadas por el largo periodo de buen tiempo. Y donde hay estructuras frágiles (fácilmente desmenuzables), pueden acabar convirtiéndose en peligrosas y mortíferas avalanchas de placas al paso esquiadores ", concluye.
 

Espectacular imagen con la zona de la desgraciada avalancha y las residencias en Tovière (Tignes)
 

“Muchos esquiadores y snowboarders no están preocupados con riesgos de 3 o 4…!"

También de acuerdo con el investigador, muchos esquiadores incluso malinterpretan esta escala de riesgo de avalancha: "En Riesgo 1 o 2 hago lo que quiero hacer y sólo me empiezo a preocupar a partir del riesgo 3/4. Pero incluso eso no es suficiente, hay que saber identificar las laderas peligrosas". Debido a que la capa de nieve es muy complicada desde el comienzo de este invierno, con zonas muy estables y zonas altamente inestables conviviendo en la misma zona, insiste.

Para finalizar recomendamos esta página: Lauegi, donde se explica muy bien el tema de los aludes y se puede consultar el estado del manto niveo.

Fuente de la noticia: FranceBleu