Baqueira Beret reducirá su expansión en el Pallars Sobirà, doce años después de inaugurar sus primeras pistas en la comarca. Los continuos cierres del puerto de la Bonaigua y las incidencias por fuertes vientos desde entonces han llevado a la estación a replantear su estrategia de crecimiento. La empresa ha presentado un nuevo proyecto a la Generalitat en el que renuncia a remontes y pistas ya aprobadas en el sector de la Peülla. En lugar de extender su dominio esquiable a nuevos terrenos, propone mejoras en los que ya ocupa para asegurar la práctica del esquí en condiciones de mal tiempo. 

 

Es por todos conocido que el remonte de La Peülla, en la Bonaigua -enlaza la comarca del Pallars Sobirá con Baqueira- está más días parado que en funcionamiento por culpa del fuerte viento en la zona. Por este motivo, la empresa gestora de los remontes quiere construir uno nuevo en el mismo emplazamiento, pero modificando el trazado, mucho más resguardado, para así mejorar la conexión y garantizar la práctica del esquí en muchos más días de la temporada. "Los fuertes vientos y los reiterados cierres del puerto de la Bonaigua nos han hecho replantear la estrategia de crecimiento y apostar por modificar este remonte", explica Aureli Bisbe, presidente de la instalación.

 

Asimismo, el nuevo proyecto también plantea nuevas pistas de debutantes a fin de asegurar los descensos esquiadores de todos los niveles y concentrar las diferentes áreas de aparcamiento previstas en la zona del Cap del Port.

 

 

Este plan de mejora con la construcción de una nueva silla en Baqueira, en la zona del Pallars Sobirà se estima que costará unos 30 millones de euros. Por ahora, sin embargo, ello no es posible porque las dos pilonas -el trazado tiene que hacerse en línea recta- penetrarían en espacio protegido. La Conselleria de Territori, a quien pertenece el parque de Aigüestortes, aún no se ha pronunciado.

 

Los que sí se han manifestado son los ecologistas. Para Joan Vázquez, portavoz de Ipcena, "lo que están pidiendo es una vergüenza y un insulto". Vázquez asegura que el problema no son las dos pilonas, "sino el impacto negativo que el remonte podría suponer para la flora y la fauna de la zona". La entidad ya ha manifestado su negativa al proyecto y, según su portavoz, "harán todo lo posible para que el proyecto no siga adelante". Y añade: "No queremos convertir el parque nacional en un parque de atracciones. Queremos preservar este espacio natural".

 

 

El nuevo remonte beneficiaría al Pallars Sobirà. O, al menos, de esa opinión es el sector turístico, ya que los esquiadores que esquian en Baqueira Beret podrían alojarse en esta comarca, mientras que en la actualidad la mayoría apuesta por el Vall d'Aran. A día de hoy, si lo hacen en el Sobirà se la juegan. Si el acceso la Bonaigua está cerrado, un trayecto de 20 minutos puede convertirse en dos horas a través del túnel de Vielha. .

Por este motivo, Consell Comarcal y alcaldes de las Valls d'Àneu lucharán todo lo posible para conseguir que el nuevo Plan Rector de Usos y Gestión (PRUG) de Aigüestortes -a la espera de ser modificado- permita la colocación de las pilonas de la discordia

 

Fuente de la noticia: El Periódico.com  Lleida.ocm