La controvertida decisión del Banco Nacional Suizo (SNB) de poner fin al acoplamiento del Franco suizo con el Euro ha sorprendido al turismo invernal (y de verano), que ya estaba sufriendo en los últimos años en Suiza. Por 1€ se recibían anteriormente aproximadamente 1,20 Francos, o lo que es lo mismo, por 1CHF se obtenían 0,80€. El significado llano de esto es que por las vacaciones que nos costaban 1000CHF realmente pagábamos 800€, o el Forfait que costaba 50CHF realmente eran 40€. Al ver los precios en Francos las cosas parecían bastante más caras de lo que en realidad eran pero al hacer el cálculo se igualaban bastante. Eso ya es historia.

El motivo principal de esta decisión, dado a conocer por el Banco Suizo, es la debilidad del Euro con respecto a monedas como el propio Franco o el Dólar. Un Franco fuerte anclado a un Euro débil puede suponer un gran problema en el futuro económico suizo. Lo natural es que cada moneda se desarrolle por su cuenta.

A corto plazo los efectos son realmente devastadores para la economía local ya que aunque por un lado las importaciones se abaratan, por el otro, las “exportaciones” suben alrededor de un 15%. El país alpino no es muy dado a importar productos del extranjero, favoreciendo siempre a la economía local. Debido a esto la primera parte de la ecuación se reduce a un margen poco significativo. Si como exportaciones entendemos todos los productos que se adquieren desde el extranjero, la segunda parte de la ecuación se ve aniquilada en todas sus vertientes, entre ellas la más importante: el turismo. Así que resulta en una situación de pérdida general.

Distintas opiniones sobre el tema aseguran que el futuro de esta “crisis” conllevará la reconducción de la economía helvética a niveles (salarios, precios, …) más europeos debido a la perdida de competitividad del país por una moneda tan cara. No hay que olvidar que la situación geográfica de Suiza la obliga a depender de sus vecinos europeos. A parte, el que ahora la relación de las monedas sea 1 a 1 no significa que vaya a continuar así. Habrá que ver como evoluciona el cambio en los próximos meses cuando la cosa se estabilice.

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Lugar de recreo en Grindelwald

De momento muchas empresas de todos los sectores se están viendo obligadas a modificar sus precios, hacer descuentos o aplicar el cambio Euro-Franco a niveles anteriores a la polémica decisión. Un factor importantísimo son los propios ciudadanos suizos (sobre todo cerca de las fronteras) que saben que comprar en Europa les sale hasta un 20% más barato, por lo que los negocios nacionales están viendo una espantada de clientes de gran escala. Solamente en el primer fin de semana tras el anuncio se contabilizaron 5000 personas más que iban a Alemania a comprar alimentos que en un fin de semana habitual. Y eso sólo en uno de los muchos pasos fronterizos.

La Asociación de Turismo Suiza dijo “Es una situación muy difícil de digerir para un turismo que no se encuentra en sus mejores momentos”. El jefe de la compañía de relojes suiza Swatch declaró “Es un Tsunami tanto para las exportaciones como para el turismo y en consecuencia para el conjunto del país”.

Vistas desde Gemsstock (Andermatt)

Las estaciones de esquí suizas reaccionan

La reacción de las estaciones suizas ha sido rápida y muchas de ellas han tomado medidas drásticas para evitar la espantada de clientes. Como ejemplo, Arosa-Lenzerheide y Saas-Fee se han unido en un proyecto  en el que se ofertan grandes ventajas al esquiar en sus dominios. Otras estaciones como Samnaun/Ischgl tienen la dificultad añadida de cruzar la frontera Euro-Franco. En este caso por ejemplo el precio siempre se ofertó en Euros y así seguirá y sin incrementos. Algo similar pasa en Portes du Soleil, donde se han aplicado descuentos del 15%. Muchos hoteles y negocios ofrecen cursos de hasta 1,30 CHF por Euro. Algunas otras regiones como Jungfrau tienen previsto aplicar medidas aunque aún no hay nada concreto. También se han escuchado medidas políticas como la reducción de los impuestos por turismo a tasa cero.

En este enlace se puede acceder a un amplio listado de ofertas.

Esta crisis supone por tanto un nuevo revés para el turismo suizo que vive momentos de recesión: en la temporada 2013/2014 se vendieron un total de 23,9 millones de forfaits, lo que supuso un 6% menos que en la temporada anterior. Y un 19% menos que en la 2008/2009 donde se vendieron 29,3 millones de pases. Aunque uno de los motivos de esta disminución sea la proliferación de deportes en los que no se requiere la adquisición de un forfait, el problema principal es el elevado precio con respecto a sus competidores en Los Alpes, ya no sólo del forfait en sí si no de los demás costes como comida o alojamiento.

Andreas Keller, portavoz de Schweizer Seilbahnen comentó hace tiempo que el principal enemigo del turismo suizo es la fortaleza del Franco que ha convertido a Suiza en un destino cada vez más caro. “Este efecto” - dijo “es para nosotros doblemente negativo ya que por un lado Suiza es demasiado cara para los ciudadanos europeos y Europa es muy barata para los ciudadanos suizos” Con la liberación del Franco esta tendencia tenderá a aumentar.

Desarrollo de la ocupación hotelera en Suiza en verano. El 100 corresponde a la tasa de 1990

Desarrollo de la ocupación hotelera en Suiza en invierno. El 100 corresponde a la tasa de 1989/90

Aunque ya en el verano de 2014 el turismo suizo creció sólo un 0,2%, BAKBASEL ha calculado para este invierno un crecimiento con respecto al invierno pasado del 2% y en verano del 2,3%. Estos datos están respaldados por el crecimiento observado a nivel mundial y europeo y por la firmeza del curso Euro-Franco. Dado que éste último ya no existe habrá que ver que resultados ofrece definitivamente el año 2015.

La temporada 2013/2014 fue especialmente mala en cuanto a nieve y condiciones meteorológicas en general, lo que influyó muy negativamente. Estos datos de crecimiento se basan también en la previsión de un invierno más benevolente con las estaciones de esquí. Lo que tampoco ha pasado, ya que la nieve ha llegado a finales de Enero. Lo que es claro es que desde el año 2008 hasta ahora los ingresos por turismo han disminuido en Suiza de forma dolorosa y parece que la nueva situación no pinta mucho mejor. Habrá que esperar a ver que resultados se obtienen al finalizar el año. En este enlace podéis encontrar el documento completo sobre el pronóstico del futuro del turismo suizo y aquí una sencilla tabla en la que apreciar los datos de forma rápida.

Ingresos totales por año en las estaciones de esquí suizas. El 100 corresponde a la tasa en 1995

A todo esto se suma la o las recientes crisis rusas, que han hecho disminuir aún más la gran cantidad de turistas rusos que pasaban las vacaciones blancas en Suiza. La caída del Rublo y la petición del presidente Putin a sus compatriotas de hacer vacaciones en su país ha llevado a muchos a no visitar Los Alpes este año. La ciudad de Sant Moritz, con su toque lujoso, es de las que más lo están notando. El número de rusos hospedados en Suiza entre Mayo y Octubre bajó un 10% con respecto al año pasado. Aunque los rusos no son los turistas más numerosos (ocupan la décima plaza) sí que son de los que más gastan; unos 230CHF al día, mientras que la media está en 180CHF.

 

Personalmente creo que Suiza debería mejorar sobre todo en infraestructuras. Ya no en más grandes estaciones si no en mejorar lo que ya tienen con tecnologías más modernas que aporten una experiencia más agradable al exigente turista. El país tiene mucho que aportar y sabiendo lo que se hace no es tan caro como parece. Personalmente sólo esquío y veraneo allí y de momento no he pagado nunca un precio desorbitado. Así que busca ofertas (en el foro tenemos una sección interesante) y disfruta de esta joya de la naturaleza. Podría ser que este nuevo revés habrá la puerta a un mundo nuevo de precios y ofertas en el país helvético.

 

Fuentes consultadas

• http://www.sueddeutsche.de/
• http://www.focus.de
• http://www.rp-online.de
• http://www.seilbahn.net