Por primera vez en Baqueira se ha disputado el descenso más espontáneo de la temporada. Red Bull Home Run llegaba a la estación pirenaica desafiando una previsión meteorológica poco propicia y dispuesto a convocar a cientos de esquiadores y snowboarders con ganas de vivir una jornada festiva. A su llamada acudieron hasta 233 participantes que durante la mañana pudieron confirmar sus inscripciones en Baqueira.

 

La carrera sobre nieve más transgresora comenzó hoy a las 17.00 horas. Ataviados con sus correspondientes botas, los participantes se reunieron en la línea de salida listos para correr los 100 metros que les separaban de sus esquís/tablas y comenzar el veloz descenso. Un recorrido único de casi 2.000 metros que los participantes encararon con ganas.

 

Desde esa espectacular carrera inicial de esquiadores y snowboarders hasta sus equipos, se pudo comenzar a apreciar la originalidad de los disfraces. Se pudo ver a seres salvajes como gorilas y tigres; a dibujos más animados que nunca, como Bob Esponja; a jóvenes de ascendencia alemana que optaron por el atuendo bávaro; e incluso a ¡bañistas¡ ajenos a las temperaturas bajo cero.

 

Sin disfraz y con mucha prisa afrontó el descenso Eduardo Puente, que se llevó el triunfo en la categoría de esquí por escasos metros en una llegada muy apretada. “Carreras como esta me parecen muy importantes porque dan otro punto de vista de la competición. Además, me lo he pasado muy bien. Animo a todo el mundo a que se apunte al próximo descenso en Valdesquí”, señala este entrenador de competición en la escuela de esquí CAEI. En la categoría de snow la victoria fue para David Vicente Echave, profesor de snow en la escuela de Baqueira. “Ha sido muy espectacular. No me esperaba tantos participantes, ni tampoco tanta gente disfrazada”, afirma.

 

Precisamente entre los disfrazados estaban Felipe Martínez y Cristian Tena, quizás los primeros bañistas de la primavera que realizaron el descenso en esquís apenas provistos de un bañador y un flotador a la cintura. La originalidad les sirvió para ser distinguidos por el jurado con el premio al mejor disfraz. “Esta carrera ha sido de lo mejor que nos ha pasado. Antes de la salida teníamos frío, pero cuando acabamos nos hubiera gustado repetir”, comentan. Un espíritu de diversión que resumen en la siguiente frase.

 

Tras la jornada en la estación pirenaica, la próxima parada del Red Bull Home Run será el domingo 30 de marzo en Valdesquí.