Sant Joan se acerca.

Purificación de espíritus, alejar las malas vibraciones, solsticio de verano.

 

La noche más corta del año.

La noche llena de tradición, de fuego, de nuevos propósitos.

 

 

Una noche diferente en muchos rincones de los Pirineos, donde el fuego rueda, donde el fuego corre, donde el fuego da tumbos montaña abajo.

 

Y es que, desde 2015, la fallas de los Pirineos, gracias a una candidatura (creo que nunca vista) que unía diferentes territorios de diferentes países, fueron declaradas Patrimonio inmaterial de la humanidad por la UNESCO.

 

Que ruede y que no pare.

Acércate a la mágica noche del 23 de junio a Andorra a vivir la recuperada tradición de hacer ver y sentir el fuego por las calles.

 

 

Hogueras por aquí, fiestas por allá.

Petardos para pequeños y grandes (¡esto parece Valencia!)

Bailes, orquestas, fiestas al aire libre.

 

Cualquier opción es buena para vivir intensamente esta noche mágica.

 

Y si hago mención a la magia tengo que escribirte sobre el 3x3

 

La nueva disciplina olímpica del baloncesto.

Alternativa, dinámica y emocionante.

 

El 24 y 25 de junio, justo después de nuestra noche de fuego (¿y pasión?), aterriza en Andorra el flamante 3x3

 

 

El FIBA 3x3 Europe Cup Andorra Qualifier trae hasta el país de los Pirineos a esta modalidad, con partidos frenéticos de 10’

 

21 equipos entre categoría femenina y masculina llenarán de juego a plaza Coprínceps de Escaldes- Engordany, en pleno eje peatonal comercial, con gradas con entrada libre y capacidad para 450 personas.

 

Y a tan sólo unos metros del espectáculo del 3x3, Escaldes- Engordany guarda rincones que te transportan en el tiempo: el puente de Engordany, que daba entrada a este núcleo que se repartía por la solana montaña arriba, hoy día conectado con Escaldes de manera casi imperceptible y lleno de colores que cortan el fondo verde de la montaña en primavera.

 

Pasear por las calles empedradas de Engordany es casi una obligación si eres un amante de los lugares con encanto, fuera de las rutas turísticas.

 

Detalles casi imperceptibles que hablan del pasado que ha configurado el presente.

Vigas de madera aprovechadas en reconstrucciones o camufladas entre chalets de diseño.

Puestas de sol de colores a la sombra del majestuoso Vall del Madriu-Perafita-Claror.

 

 

Escondido entre lo que podría parecer una selva urbana, otro rincón mágico: el Pont (puente) dels Escalls.

 

Construcción del siglo XIII que permite el paso del río Valira del Nord.

 

Pero el Pont dels Escalls no es un puente cualquiera: en él, y junto a la “Creu dels Escalls”, tuvo lugar la firma dels “Pariatges” (principal documento histórico de Andorra hasta la aparición de la Constitución, en 1.993) entre el obispo de Urgell y el conde de Foix, dando lugar a la creación del coprincipado.

 

Olvidado durante años, ahora se puede disfrutar con el camino arreglado, señalización nueva, acceso renovado.

 

A partir de este punto, diferentes opciones de senderismo urbano, entre sol y sombra por el Rec del Solà, por el Camí Ral.

 

Hacia el norte, hacia el sur.

 

Hacia el este, hacia el oeste.

 

¿Vienes a perderte?