Llegan las ansiadas vacaciones para muchos.

 

Tú quizás busques lugares abarrotados de gente al lado del mar.

 

Tú quizás escojas algún lugar que has visto en un catálogo de agencia de viajes.

 

Mientras, yo, continuaré trabajando (y andando), por los silenciosos y no muy conocidos valles de Andorra.

 

La ruta que te propongo hoy es por el bonito y salvaje valle del Madriu, saliendo desde el puente de Sassanat y subiendo por el camino empedrado por donde nuestros antepasados bajaban madera, hierro, “herbes remeieres” (hierbas con propiedades curativas)

 

En el cartel próximo a Ràmio y para aprovechar la sombra del bosque, hoy cogeré el camino que indica Perafita.

 

La ruta, marcada con puntos amarillos, tiene unos 1.000m de desnivel, pero vale la pena hacerla si te gustan las rutas solitarias.

 

Durante un rato te acompañará el sonido del agua, pero mientras vas ganando altura, sólo escucharás el cantar de los pájaros (piensa en proveerte de líquido y algo de comida para una excursión de medio día por la montaña por zona inhabitada)

Llegarás a la Cabana de Perafita, a pocos metros del refugio libre del mismo nombre.

La distancia que los separa, está trillado de madrigueras de marmota.

 

Desde allí, vistas privilegiadas sobre los límites con la zona de los Estanys de la Pera catalanes (al otro lado de la montaña), sobre el Port Negre (por donde se puede cruzar hacia La Rabassa)

Una opción es alargar la circular y llegar hasta el escondido Estany de la Nou.

Yo, inicio el descenso hacia Entremesaigües, trazando así una circular con subida por ruta poco transitada para bajar por el GR 11.10

 

El camino no tiene ningún paso técnico ni dificultad, más allá de estar acostumbrado a andar por la montaña en terreno cambiante (camino, piedra, raíces)

 

La bajada me lleva hasta la siempre agradecida humedad del río del Madriu, con bonitas fuentes naturales donde cargar agua (si no estás acostumbrado a beber de los barrancos, mejor abstenerse)

 

Una vez llegado al punto de inicio, me acerco a la “city” para visitar la nueva exposición temporal del CAEE (centre d’art d’Escaldes-Engordany), llena de colores, formas y texturas: “This is Pop Art”, con Warhol, Haring, Indiana, Lichtenstein o Rauschenberg. La propuesta, con entrada gratuita, estará en Escaldes-Engordany hasta el 23 de septiembre.

 

 

La sala, al final de la parte peatonal de vivand (y donde encontrarás los caramelos gigante de Laurence Jenkell), a escasos metros del Museu Carmen Thyssen Andorra y de la sala Artalroc, ofrece un triángulo cultural de gran valor que vale la pena no perderse, enriquecido hasta el 28 de julio por la "biennal Landart Andorra 2017", con la fábrica de la lana como sala de exposiciones (entrada libre)

 

Y como siempre te recomiendo (si te quedan fuerzas), no te pierdas los conciertos y propuestas callejeras de este verano, con punto neurálgico en la plaça Coprínceps, como la “nit del silenci” del 20 de julio. 

 

¿No sabes qué es?

Pues ven y descubre esta divertida forma de disfrutar de la música sin sonido y llenando la plaza de colores.

 

+propuestas culturales Escaldes-Engordany (Andorra): agenda.ad

+música: calle y festivales musicales

+oficina turismo: Façana de l’art (al lado del Museu Carmen Thyssen Andorra)

 

 

 

 

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