Un ex trabajador de Atomic Skis, de 58 años, fue condenado este miércoles por el Tribunal Regional de Salzburgo a 14 meses de prisión condicional tras haber desviado 2.600 pares de esquís con defectos menores durante su empleo en la fábrica de Pongau, Austria.

 

 

El acusado, cuyo trabajo consistía en disponer de los esquís que no superaban los estrictos controles de calidad, utilizó su posición para apropiarse de los productos destinados a ser descartados.

 

 

Las investigaciones revelaron que, durante la noche, el exempleado retiraba los esquís de la planta, una práctica que quedó registrada en vídeo por las cámaras de seguridad de Atomic, lo que finalmente fue clave para la apertura del caso.

 

Además, en un operativo realizado en noviembre de 2023 se incautaron más de 300 pares en la vivienda del acusado, lo que corroboró la magnitud del hurto.

 

 

El proceso judicial también involucró a un segundo acusado, un ciudadano búlgaro de 72 años. Este individuo fue señalado por haber comprado 600 pares de esquís robados al primer implicado para revenderlos, presuntamente a 74 € el par, aunque él negó haber obtenido ganancias de tal magnitud.

 

El tribunal, sin embargo, lo encontró culpable de encubrimiento y le impuso una pena de ocho meses de prisión condicional.

 

 

La empresa, que patrocina a esquiadores de élite como Mikaela Shiffrin, Sofia Goggia y Aleksander Aamodt Kilde, ha señalado que la práctica de revender productos defectuosos no solo puede dañar la reputación de la marca, sino también poner en riesgo la seguridad de los usuarios, ya que los esquís no están destinados para su uso en pistas.

 

El fiscal Florian Weinkamer explicó que la empresa descartaba estos esquís deliberadamente, para evitar que los productos con mínimas fallas afectaran los estándares de calidad y, en consecuencia, la confianza de los clientes.

 

 

Durante el juicio, el acusado mostró signos de arrepentimiento, calificando su proceder como “estúpido” y expresando disculpas a la empresa, su familia y al tribunal.