El reconocido freerider Aymar Navarro, oriundo de la Val d'Aran, ha llevado su pasión por el esquí extremo a nuevos límites en los impresionantes fiordos del norte de Noruega.

 

 

Con el telón de fondo del mar, Aymar se lanzó desde las cimas del corredor, desafiando paredes angostas y riscos imponentes en un descenso que puso a prueba tanto su destreza como su coraje.

 

 

 

 

El descenso que protagonizó Navarro, capturado en impresionantes imágenes, fue descrito por él mismo como un sueño hecho realidad. Con una caída casi vertical de 1000 metros a su derecha, cada movimiento debía ser calculado con precisión para evitar deslizamientos de nieve potencialmente mortales. Sin embargo, la recompensa por superar este desafío fue incomparable.

 

 

"Es una de esas bajadas que sueñas toda tu vida", expresó el freerider. "No podía permitirme cometer errores. Tenía que mantener el control para deslizarme en diagonal y evitar que la nieve que caía lo hiciera debajo de mí. La recompensa al final fue increíble".

 

 

 

Aymar Navarro continúa desafiando los límites de lo posible en el mundo del freeride, inspirando a otros con su valentía y determinación para conquistar las montañas más imponentes del planeta.