Este año, ambas han dado un paso al frente con una inversión conjunta de dos millones de euros -un millón cada una- para mejorar sus instalaciones y ofrecer a los visitantes una mejor experiencia.

 

 

Para mantener su atractivo y competitividad, las estaciones de esquí no escatiman en inversiones que garantizan una experiencia de primera clase para los esquiadores.

 

Andrés Pita, subdirector de la estación de Astún, cuenta al Periódico de Aragón que su complejo ha experimentado cambios sustanciales, con una inversión cercana al millón de euros.

 

 

Esta actualización era una prioridad que se retrasó debido a la pandemia, pero finalmente se ha llevado a cabo.

 

Astún ha demostrado ser resiliente, registrando una temporada exitosa con cifras sólidas de esquiadores, a pesar de un comienzo titubeante con unas Navidades desafiantes debido a la falta de nieve.

 

 

Esta última sustituirá al restaurante Henri Abelé Lounge, que sufrió un devastador incendio en noviembre de 2021.

 

 

 

Gracias a la ayuda del Gobierno de Aragón, que proporcionó cuatro millones de euros para cubrir los gastos de apertura, Candanchú pudo mantener sus puertas abiertas.

 

 

Álvaro Luna, director de Candanchú, explica en ese mismo periódico que, además de las revisiones de rutina, este año se están llevando a cabo exámenes extraordinarios en los telesillas, que son necesarios cada cinco o diez años.

 

Estas mejoras son fundamentales para garantizar la seguridad y la comodidad de los esquiadores.

 

Sin embargo, no solo las infraestructuras y los equipos experimentan mejoras. Se están realizando intervenciones clave en las pistas para maximizar el uso de la nieve natural.

 

 

Estas inversiones son esenciales para asegurar la calidad y la duración de la temporada de esquí.

 

 

 

La apertura de la temporada de esquí durante el puente de La Constitución depende en gran medida de las nevadas a fines de noviembre, lo que a su vez afecta significativamente a la industria hostelera en la región.

 

Un buen comienzo en la temporada permite a los negocios locales sobrevivir hasta el 26 de diciembre, según Anabel Costas, vicepresidenta de la Asociación de Hostelería y Turismo de Huesca.

 

 

Continúan trabajando en la actualización de máquinas pisapistas y sistemas de innivación más eficientes, así como la mejora de algunas de las pistas.