Si nos vamos a la isla del norte, Hokkaido, ya nos salimos de la escala...  los promedios de nevadas de alrededor de unos 15 metros por año en Niseko y en las estaciones de esquí de la zona, son asombrosos pero ciertos, (algunos informes, indican registros puntuales en las zonas más altas de hasta 38 metros de nieve acumulados en un año...). En 2018 cayeron 15,5 metros de nieve en la ciudad de Hakuba en tan solo 10 semanas...

 

 

 

 

Este viento gélido sopla a lo largo de Asia, recoge la humedad del Mar del Japón y luego la vierte en forma de nieve cuando golpea las islas montañosas de Japón.

 

 

Japón tiene montañas de hasta 3.000 metros de altura justo en la costa, lo que obliga a que el aire cargado de humedad suba y baje rápidamente ya en forma de nieve.

 

De forma que no necesitas borrascas en Japón. ¡Solo necesitas que este viento sople y listo! Nieva.

 

“Las montañas de Japón están tan nevadas porque son susceptibles al viento frío de Siberia que golpea las montañas de la isla. Es como la nieve con efecto lago en los EE. UU., pero a una escala mucho mayor", explica Nick Wiltgen, meteorólogo del Weather Channel al canal de nieve SnowBrains.

 

 

La nieve en polvo de Japón es considerada la mejor del mundo, además, es el segundo país con más estaciones de esquí -algunas pequeñas o poco modernizadas-, junto a Estados Unidos, el país nipón cuenta con más de 500 estaciones de esquí.

 

No es de extrañar que Japón haya organizado en dos ocasiones los Juegos Olímpicos de Invierno, la primera vez en Sapporo (1972) y la segunda en Nagano (1998).