El ciclista extremo “Max” Stöckl desciende por una de las pistas de esquí más difíciles del mundo
Max Stöckl creció en Kitzbühel y siempre soñó con conquistar esta pista. Foto: © PHILIP PLATZER/RED BULL CONTENT POOL
Sun, 28/01/2018 - 19:03
El austríaco cumple un sueño largamente acariciado y en Kitzbühel bate un récord único sobre nieve y hielo con una velocidad máxima de más de 103 km/h.
Max Stöckl es un hombre que sabe lo que quiere y ha dedicado su vida a buscar récords mundiales de velocidad durante más de 20 años.
A finales de 2016, Markus batió el récord del mundo de velocidad sobre tierra con una bicicleta de montaña alcanzando nada menos que 167.6 km/h en un vertiginoso descenso desde la cima de un volcán en el desierto de Atacama, en Chile. No contento con este logro, el piloto australiano ha cambiado las áridas pistas de Atacama por las cumbres nevadas de los Alpes, descendiendo sobre una bicicleta de montaña una de las pistas de esquí más difíciles del mundo: la mítica Hahnenkamm de la estación austriaca de Kitzbühel, escenario de la Copa del Mundo de Esquí Alpino.
El Kitzbüher finalmente pudo realizar este sueño espectacular, que ha estado con él durante mucho tiempo: equipado con una bicicleta de montaña de serie y amortiguadores de 15 mm de recorrido, ¡resultó ser la pista de esquí más dura del mundo!.
Max Stöckl creció aquí en Kitzbühel, con esta imponente montaña a la vuelta de la esquina, y siempre soñó con conquistar esta pista en una competición con la bicicleta de montaña cuesta abajo: ahora era el momento de medirse al Tirol y entrar en un duelo sin piedad con esta increíble pista de carreras.