Después de la magnífica temporada que realizó el año pasado y que la llevó a ganar el Globo de Cristal de la Copa del Mundo de Slalom Gigante, la austriaca Eva-Marie Brem empezaba con ganas aunque con una discreta actuación, el Circuito Alpino de esta modalidad el 22 de octubre en Sölden. La suerte parecía esquiva para la campeona que tan solo logró estar dentro del top 30 de la clasificación de la primera carrera de 2016/17.

 

Sin embargo a esta situación muy puntual, y gracias a la excelente trayectoria de la esquiadora, recibía junto a Marcel Hirscher el premio a la mejor deportista del año de Austria en una ceremonia celebrada el pasado 27/10 en Viena. Nadie dudaba de que Eva-Marie estaría en todas las quinielas para manterner su reinado en Gigante

 

 

Pero la suerte es caprichosa y dejaba claro que no iba a estar al lado de Brem durante este año; mientras entrenaba en las pistas de Thurn Pass en el dominio de Kitzbühel en el Tirol para estar a punto para la nueva prueba que se celebrará en Levi (Finlandia) el 12 de noviembre, la corredora se partía la tibia y el peroné de su pierna izquierda al engancharse en una de las "puertas" del recorrido. 

 

Trasladada rápidamente al cercano Hochrum Private Hospital de Rum (uno de los mejores y más equipados centros médicos de Europa), la esquiadora de Völkl tenía que ser intervenida para estabilizar los huesos rotos a causa de la fea caída que había sufrido. Christian Hoser, médico de la selección austriaca de esquí alpino, confirmaba que aunque la operación había sido un éxito, la corredora estará de baja entre cuatro y seis meses, por lo que se perderá toda la temporada de Copa del Mundo incluido el Mundial de St. Moritz y en consecuencia, no podrá defender su reinado en el Gigante alpino.

 

Te esperamos para la siguiente, Eva-Marie.