La imagen de trabajadores del sector turístico viviendo en furgonetas y autocaravanas en los pueblos de Ibiza porque no pueden hacer frente al alquiler de los pisos en temporada alta hace tiempo que dejó de ser una novedad. Esta práctica se está trasladando ahora a las estaciones de esquí.

 

 

El esquí es una de las principales actividades económicas en la región de Lleida, generando más de 2.000 puestos de trabajo directos en la temporada de invierno, a los que se suman los trabajadores vinculados a sectores turísticos como hoteles, restaurantes y otros negocios.

 

La demanda de mano de obra en esta industria es significativa, y, por lo tanto, es un sector económico vital para la región.

 

Sin embargo, la creciente presión turística ha provocado un aumento significativo en el precio de la vivienda en el Pirineo catalán, lo que dificulta a muchos trabajadores de temporada del esquí y del turismo encontrar alojamiento a un precio razonable.

 

 

Esto ha llevado a que muchos trabajadores de temporada del esquí y del turismo, así como otros que eligen esta opción como modo de vida, opten por vivir en autocaravanas, furgonetas o camiones adaptados.

 

 

La falta de opciones de alojamiento a precios razonables ha forzado a muchos a buscar alternativas para poder trabajar y vivir en la región.

 

Esta situación ha afectado directamente a la capacidad de los empresarios locales para contratar personal de temporada en momentos de mayor actividad, y en consecuencia, se ha traducido en una menor calidad del servicio ofrecido a los turistas.

 

 

En respuesta a situaciones en las que se alquilaban caravanas como si fueron alojamientos a pie de pistas, algunos municipios, como Naut Aran y el Conselh d'Aran vetaron el aparcamiento de las autocaravanas en los estacionamientos de Orri y el Pla de Beret. Ahora, como alternativa se han habilitado áreas de estacionamiento para autocaravanas y furgonetas en una parte del estacionamiento de Baqueira 1500, pero estas áreas se han llenado rápidamente y se han convertido en una opción popular para muchos trabajadores de temporada, carecen de los servicios esenciales para este menester.

 

 

Además, algunos empresarios locales han comenzado a ofrecer alojamiento a sus empleados -como ya hace años que se hace en Andorra- para superar la escasez de vivienda. Sin embargo, esta práctica también ha presentado algunos problemas, como el incumplimiento de los contratos de alquiler por parte de algunos trabajadores.

 

Para hacer frente a esta situación, los ayuntamientos, el Conselh y los empresarios están trabajando en conjunto para encontrar soluciones a largo plazo. Además, se están llevando a cabo iniciativas para promover la construcción de viviendas asequibles para trabajadores de temporada.