Parece que ha empezado el invierno en los Alpes y que no quiere irse de los Andes ni de Australia.

 

El aire polar ha causado un enfriamiento significativo al norte de los Alpes, donde los termómetros marcaron máximas de 14 grados. Durante la noche del sábado, la línea de nieve en Suiza cayó por debajo de los 2.000 metros y localmente incluso por debajo de los 1500 metros, llegando a puntos como Ebenalp en Alpstein a 1640 metros, como anunció Meteonews Suiza en Twitter.

 

A causa de las nevadas, se cerraron cuatro pasos de carretera durante algunas horas y el uso obligado de cadenas en otros tantos (Paso Furka, Paso Grimsel, Paso Nufenen, Paso Susten, Paso Flüela, Paso de Albula, Klausenpass y Paso Oberalp).

 

Según Meteonews, se acumularon hasta 10 centímetros de nieve fresca sobre los 2000 metros.

 

 

 

Situación muy parecida al glaciar de Val Senales (Italia), que abrió el viernes 16 de septiembre gracias a la nieve acumulada en primavera y que durante el fin de semana ha recibido casi 20 centímetros nuevos.

 

La nevada y la bajada de las temperaturas en los glaciares de los Alpes, que ha llegado también a La Plagne y a Dolomiti Superski, permitirá avanzar la reapertura de Zermatt (Suiza), que recuperará el esquí a partir de este martes 20 de septiembre.

 

Mientras, en la otra parte del mundo, donde ya es primavera, la nieve parece que no quiere abandonar las montañas.

 

 

 

 

Y lo de los Andes ya no tiene nombre. Tras una temporada increíble, este fin de semana se han medido hasta 3 metros de nieve en la Frontera entre Chile y Argentina en el Paso Cardenal Samor y se han tenido que cortar carretera en el Chubut y los centros de esquí ya no dudan en poder alargar la temporada hasta mediados de octubre.