Varios esquiadores de un telesilla de Beech Mountain Ski Resort, en Carolina del Norte, tuvieron que ser hospitalizados este 7 de enero después de que una tubería rota de un cañón de nieve artificial les rociara con agua helada.

 

"Algunos esquiadores salieron disparados de su silla por la presión del agua, mientras que se podía ver a otros pasajeros del remonte saltando de sus asientos intentando no ser alcanzados por el chorro de agua helada", explican testigos a los medios locales y en las redes sociales.

En lugar de disculparse y asumir toda la responsabilidad, la gerencia de Beech Mountain Resort culpó del incidente a un esquiador, según WCNC, alegando que él esquiador rompió una boca de riego al chocar con ella (y, por lo tanto, causó el desastre).

 

 

 

"El hidrante estaba debajo de una silla cargada, lo que provocó que varios clientes se mojaran", dijo el complejo. "Nuestro equipo de operaciones y seguridad trabajó diligentemente para descargar el remonte y drenar el sistema de manera segura. Avery EMS (servicios de emergencias) transportó a dos clientes a un hospital local con lesiones que no amenazaban su vida. Creemos que todos están bien fuera de la situación desafortunada, y las operaciones están en un horario regular".