Un grupo ecologista pone el punto de mira a la pista Barcelona de La Molina
La pista Barcelona. Foto (I.S.T.)
El Grup de Defensa de la Natura del Berguedà quiere evitar que se proceda al re-acondicionamiento de la pista negra Barcelona de La Molina.
Foto de una baliza de la pista Barcelona (Foto: IST).
La pista Barcelona, a pesar de ser uno de los trazados más antiguos de La Molina, sigue siendo una gran desconocida. Esta pista está llamada a formar parte del tramo central de la pista de descenso de la candidatura Barcelona-Pirineos 2030. Una pista o estadio de descenso que, en realidad, será la combinación de las actuales pistas La Coma (o Comabella), Barcelona y Olímpica.
De las tres pistas, especialmente la Barcelona, antes deberá reformarse para adaptarse a las normas FIS para poder ser homologada y albergar unas pruebas de descenso de la Copa de Europa, las cuáles estarían programadas para organizar en uno o dos años vista. Pero su reforma y puesta al día va con retraso y ahora peligra por una denuncia de una entidad ecologista.
La pista Barcelona, un trazado histórico
La pista Barcelona es de calificación técnica negra, se localiza en la vertiente noreste de la montaña de la Tosa (2.535 m) y se accede a ella por el telecabina Cadí-Moixeró. A día de hoy no dispone de innivación y a menudo, a pesar de tener nieve, no se pisa. Actualmente es una de las pistas más buscadas por los locales de la estación para practicar con nieve fueraspistas (nieve no pisada) despues de una nevada generosa.
La pista Barcelona es una de las pistas consideradas históricas de La Molina. Fue inaugurada en 1957, cuando en el actual trazado de la pista se organizó una carrera con el nombre de Copa Barcelona. Este hecho fue lo que dio origen a bautizarla con el citado nombre.
En un principio iniciaba su trazado en la parte superior de la pista Comabella (justo antes de la entrada en el muro) y seguía por una vertiente noreste de la montaña hasta enlazar con la actual pista Olímpica, en un punto cercano al Torrent Gran y al actual trazado de la línea de alta tensión que une el Berguedà con la Cerdanya por el coll de Pal.
Pista Barcelona ¿la futura pista de descenso que La molina no tiene?
Con el paso de los años el trazado más bajo de la Barcelona, el que se localiza entre bosque, se fue quedando en el olvido. Sin embargo, en el 2016, el PDU (Pla director urbanístic) de la Molina-Masella redactado para la reordenación de las dos estaciones, volvía a recuperar íntegramente la pista para situarla de nuevo en el dominio esquiable. Y el objetivo era claro: la Barcelona estaba llamada a ser la pista de descenso homologada que La Molina a día de hoy no tiene.
Actualmente los esquiadores que bajan por la pista Barcelona pueden hacerlo en su parte alta, completamente descubierta de bosque. Al llegar a la línea de vegetación la pista queda cortada en seco y deben hacer una travesía prácticamente plana y sin desnivel para enlazar con la pista Olímpica.
La pista Barcelona, trazada en negro, en un mapa de los años 80 de La Molina (Foto: IST).
Una entidad ecologista se opone a la reforma de la pista
Ahora una entidad ecologista del Berguedà, el Grup de Defensa de la Natura del Berguedà se opone al acondicionamiento de la pista Barcelona por un supuesto impacto ambiental. La entidad ha entrado una petición o instancia al Ayuntamiento de Bagà (dentro de su término municipal se encuentra la parte alta del trazado de descenso), en la cual pide paralizar el proyecto y abrir un proceso participativo sobre la conveniencia de la reforma de la citada pista.
Entre los argumentos de la entidad ecologista para oponerse, según publica hoy ACN, está el impacto ambiental asociado a una tala de árboles y a un movimiento de tierras. Creen que esta intervención puede tener efectos en la flora y la fauna de esta zona. También afirman que la “Barcelona” tendría poco uso porque únicamente se habría planteado para acoger la celebración de los Juegos de Invierno del año 2030.
Lo más visto
Te puede interesar
Noticias relacionadas
- 1 of 5
- siguiente ›