¿El mejor esquiador del mundo un niño de 12 años? Juzga por ti mismo
Kai en un gran vuelo en Jackson Hole. (Foto: @niclagre)
Sat, 26/10/2019 - 06:07
Kai Jones es local de Jackson Hole y una de las grandes promesas del freeride mundial. Su último vídeo ha causado sensación.
Saltos increíbles, bajadas entre rocas y pendientes de nieve virgen... El último vídeo de Kai Jones ha impactado al mundo del freeride y muchos se preguntan si estamos ante el mejor esquiador del mundo de su edad Jones e un joven esquiador de 12 años que tiene revolucionado el mundo del esquí.
Este chaval, local de Jackson Hole (Wyoming, Estados Unidos), ha protagonizado un vídeo en el que demuestra que, pese a su corta edad, está llamado a hacer grandes cosas en el mundo del freeride.
Teton Gravity Research, la productora que ha publicado su último vídeo, ya se pregunta si Jones "¿es el mejor esquiador del mundo de 12 años?". Y es que en el vídeo aparece descendiendo auténticas paredes de nieve virgen y ejecutando todo tipo de saltos que muchos freeriders ni soñarían.
El invierno pasado esquió las líneas más retorcidas que los Tetons tienen para ofrecer y con algunas líneas increíbles de Alaska. Aunque su esquí ya lo ha llevado lejos, Targhee siempre será el hogar de Kai.
Crecer en Jackson Hole, Wyoming, ayuda. Encontrar un mentor profesional Tim Durtsch, tampoco hace daño cuando eres un prodigio del freeride. A su lado, Tim Durtschi, uno de los grandes nombres del país. Nacido en Alaska, Tim ocasionalmente participa en competiciones como Red Bull Linecatcher y Cold Rush mientras trabaja en varios proyectos cinematográficos
"Esquiar con Tim es increíble porque es un gran mentor", dice Kai en Teton Gravity Reseach. "Me muestra las líneas, me motiva, me da consejos y me ayuda a superar mis miedos". A veces estoy un poco nervioso y tengo muchas cosas que me pasan por la cabeza. Entonces, para motivarme, a Tim le gusta "psicoanalizarme" y contarme chistes cuando estamos allí. (...) También me enseña a esquiar con seguridad. Me muestra las pequeñas señales de advertencia, siempre diciéndome que mantenga los ojos y los oídos bien abiertos para escuchar y mirar las montañas. (...) Me hace progresar. El año pasado, solía pedirle que me mostrara la trazada en las líneas. Esta temporada, me miró y dijo: "Oye, Kai, ¿puedes comenzar esta vez?".