Falls Creek Ski Resort vive horas dramáticas por la desaparición de un niño de 8 años
Riley, el niño rescatado junto a Callum Brown, responsable de respuesta en montaña de las Patrullas de Esquí de Falls creek
Wed, 13/07/2016 - 13:03
La estación de Falls Creek vive durante unas horas un dramática situación tras la desaparición de Riley, un niño de 8 años que se perdía mientras una intensa tormenta de nieve azotaba este resort de los Alpes australianos en el Condado de Victoria, al sudeste del país
El martes 12 de julio, ayer, será un día que tardará tiempo en olvidarse en Falls Creek Alpine Resort, Australia por la situación de máxima tensión en el que Riley, un niño de 8 años estuvo desaparecido en medio de una intensa tormenta de nieve.
Los padres daban la señal de alarma pasadas las dos de la tarde y rápidamente se organizó un dispositivo de búsqueda coordinado por los distintos servicios de emergencias del resort australiano al que se incorporaron efectivos de la Policía de Victoria, el pequeño condado cuya capital es Melbourne al sureste del país, miembros del SES (Victoria State Emergency Service), equipo de rescate alpino del cuerpo de bomberos (Country Fire Authority), patrullas de esquí de Falls Creek y numerosos voluntarios que acudieron sin dudarlo en busca del niño.
Village de Falls Creek Alpine Resort (Australia). Foto: Falls Creek Facebook
El operativo desplegado recibió inmediatamente el apoyo del personal del Centro Médico de la estación que dispuso una ambulancia lista para cualquier contingencia que pudiera ocurrir. Al cabo de unas tres horas, sobre las 6 PM (10 AM hora española), el contingente de rescate se presentaba con Riley que, con una fuerte hipotermia pero vivo, enseguida fue tratado por los médicos y más tarde devuelto a sus padres que ya pudieron respirar aliviados.
La rapidez con que se desplegaba un amplio dispositivo organizado por los equipos de rescate y la colaboración ciudadana fueron la clave del éxito de la operación
Los detalles de cómo se perdió el chaval no han trascendido, pero podemos imaginar. La tormenta, niebla, viento y nieve, un descuido, un niño... Afortunadamente, gracias a la rápida actuación y diligencia de los servicios de emergencias y a la ayuda desinteresada de los esquiadores que acudieron en masa alertados por las redes sociales poniéndose al servicio de las autoridades, la historia ha tenido un final feliz.
Stuart Smythe, CEO de Falls Creek Resort Management agradecía la rápida respuesta de los equipos de socorro y la colaboración de los ciudadanos, héroes anónimos todos sin cuya ayuda quizá hubiera habido un desenlace trágico.