El viaje empieza unos meses antes, cuando tenemos que decidir a dónde ir. Barajamos volver a Dolomitas, donde hemos ido las cuatro últimas temporadas, pero, al final, decidimos seguir conociendo nuevos lugares. Otro problema que teníamos eran las fechas, al ser la temporada muy apretada y sólo nos quedaba después de Semana Santa, en abril, y muchas estaciones cerraban esa semana. Como problema de nieve no había, el único que nos podíamos encontrar era el de la calidad de la nieve, pero todo lo contrario, cantidad, calidad y muy buen tiempo.