El calendario de apertura de algunas de las grandes estaciones de esquí de los Alpes señalaba los fines de semana del 17-18 y del 24-25 de noviembre como los elegidos para arrancar la temporada de esquí 2018-19.

Las altas temperaturas de las últimas semanas habían puesto en peligro el día “D”. Primero se cayó el 17 de noviembre… pero la nevada de estos últimos días y los buenos augurios de que siga nevando en los próximos, ayudarán a que se confirme que se pueda cumplir el segundo plazo. Entre este miércoles y el fin de semana han anunciado su apertura grandes resorts como Tignes, Val Thorens, Zermatt o Cervinia, entre otros.

Hasta el momento se han registrado hasta 50 cm de nieve fresca en estaciones como la italiana Arabba, en las Dolomitas, aunque en la mayoría de los casos se han acumulado entre 10 y 30 centímetros de esquí, como en Chatel, en el complejo franco-suizo de Les Portes du Soleil, o la austriaca Ischgl.

En las últimas 24 horas ha estado nevando nuevamente en los Alpes y los Dolomitas y se espera que la nieve continúe durante la próxima semana de forma más ligera en muchas áreas.

Las precipitaciones en forma de nieve vuelven después de varias semanas cálidas y han venido acompañadas de un descenso de las temperaturas que ha permitido a los sistemas de fabricación de nieve funcionar durante las 24 horas del día.

De mantenerse estas condiciones, los distintos centros de esquí de los Alpes irán abriendo sucesivamente durante los próximos 4 fines de semana.

Salvo excepciones, la mayoría de las estaciones de esquí ya abiertas en los Alpes cuentan con glaciares de gran altitud como Hintertux, Sölden, Saas Fee y Cervinia / Zermatt y tenían abiertas entre 5 y 20 kilómetros esquiables.

A partir de ahora, algunas ya abrirán hasta 50 km, como Val Thorens, que ha anunciado que pondrá en marcha, al menos, un 30% de sus pistas y remontes mecánicos,