El mítico puerto de montaña italiano del Passo dello Stelvio se convirtió por unos días en el patio de juegos de Markus Eder y Bene Mayr. 

La serpenteante carretera, un lugar donde cada año se producen intensas batallas entre los ciclistas en el Giro de Italia, se convirtió en una carrera de saltos al vacío y por encima de la carretera en no menos de 12 ocasiones, después del trabajo del equipo durante 3 semanas para acondicionar la vía de subida a la estación de esquí como un lugar para la exhibición de los dos esquiadores. 

La verdad es que parece tan divertido de ver como de hacer... o no.