Javalambre busca panadero, no es necesario que sepa esquiar
Camarena de la Sierra cuenta en su municipio con la estación de esquí de Aramón Javalambre.
Sun, 28/03/2021 - 07:28
El Ayuntamiento de Camarena de la Sierra quiere candidatos a ser posible con hijos para que la escuela siga abierta y ofrece un alquiler del horno por un euro al año.
Las pistas de esquí de Aramón Javalambre están a tan solo 10 km de Camarena de la Sierra. Esa es la razón por la cual este pueblo de la provincia de Teruel cuenta con cinco restaurantes, varios hoteles, albergues y servicios turísticos, a pesar de tener apenas 100 habitantes y una escuela con cuatro niños.
El próximo curso, dos de estos menores se irán, uno porque por edad debe ir a estudiar a la capital y el otro porque el panadero, que es su padre, se va a Valencia.
O sea, que en unos meses, Camarena de la Sierra corre el riesgo de perder dos servicios básicos de una tacada: la escuela y la panadería.
El Ayuntamiento no está dispuesto a ello y ha lanzado un anuncio con una oferta de empleo para encontrar un nuevo panadero, ya que el horno del pueblo es propiedad del consistorio.
Las condiciones no están nada mal: alquiler del local totalmente equipado por 1 euro al año y una vivienda de cuatro habitaciones reformada con un precio a negociar. “En principio el alquiler son 200 euros al mes, pero se puede negociar y si cumplen con todos los requisitos la podríamos dejar gratis durante un tiempo”, explica el alcalde Camarena de la Sierra, Francisco Narro.
El principal requisito demandado por el Ayuntamiento es que los candidatos tengan experiencia demostrada como panaderos. “Queremos a alguien profesional que pueda hacer funcionar el horno desde el primer día para dar servicio a los vecinos”, señala el alcalde, que explica que ya han recibido muchas llamadas de personas y familias que buscan un entorno rural para empezar una nueva vida, pero que no cuentan con experiencia en el oficio.
El horno municipal, el único que hay en la población. (Foto: Ayuntamiento de Camarena de la Sierra).
El todavía panadero, Alejandro Pradas, asegura que “el sitio es maravilloso para vivir, un lugar ideal para una familia a la que le guste la naturaleza”. Pradas llegó al pueblo procedente de Valencia hace cuatro años y el próximo 1 de julio deja el negocio para embarcarse en una nueva aventura empresarial. “Voy a montar una panificadora, además estoy aquí solo con mi hijo y es difícil llevar el negocio y atenderlo”, se justifica.
Con las pistas de esquí de la estación de Javalambre situadas en el municipio, Camarena de la Sierra ha disfrutado de una gran prosperidad gracias al turismo y a las numerosas segundas residencias de la zona. Sin embargo, la pandemia de la Covid-19 ha dejado al pueblo sin su principal fuente de ingresos. “Llevamos un año con las pistas cerradas y no vienen turistas. Además, aquí se realizan numerosos campamentos para niños en verano y tampoco han venido”, explica el alcalde.
Una caída de la actividad que ha afectado a los negocios del pueblo vinculados al turismo. “De todos los bares solo queda uno abierto, y se mantiene para dar servicio a los vecinos”, lamenta el edil.
Tampoco vive ajeno a la crisis del horno, pero según el panadero, “aún sigue siendo rentable y trabajando con seriedad se puede ganar lo suficiente para que una familia viva bien. Eso sí, hay que trabajar mucho, los fines de semana cuando viene la gente a esquiar o a la montaña y también en verano, que se multiplica la población”.
Además de pan, el horno vende repostería como coquitos, bollería, pastas o magdalenas y el popular pan de San Pablo, patrón del pueblo, que lo elaboran las mujeres en el horno municipal.
El futuro del colegio está también ligado al del horno de pan. Por eso, se prefiere que el aspirante a panadero tenga hijos en edad escolar que se trasladen a vivir a Camarena de la Sierra y sin ser indispensable, hará ganar puntos a los candidatos.
Por el momento, el proceso de selección sigue abierto y el Ayuntamiento continúa buscando al panadero perfecto, que no es necesario que sepa esquiar.