Cuatro fallecidos en los últimos ocho días en las montañas del Pirineo de Huesca
Peñaforca. Foto archivo
Mon, 14/12/2015 - 13:16
Ya son cuatro los fallecidos en las montañas oscenses en la última semana. Al parecer, las víctimas tendrían en común el haber resbalado con el hielo para acabar despeñándose por las laderas de los distintos valles del Pirineo aragonés
Otra trágica noticia nos llega desde el Pirineo aragonés. Un excursionista más, y ya van cuatro en los últimos ocho días, ha fallecido mientras hacía montañismo en el Valle del Hecho.
J.M.L.P., natural de Teruel y con 45 de edad, se despeñaba por una ladera del Peña Forca de 2341 m de altitud sin que se pudiera hacer nada por salvarle la vida. Los bomberos de rescate de la localidad de Pau (Francia) evacuaron en helicóptero el cuerpo del fallecido hasta la salida desde España del túnel de Somport pues el del equipo de rescate de la Guardia Civil no pudo despegar debido a la niebla reinante en el lado aragonés del Pirineo.
La desgracia se ha cebado estos últimos días con en las montañas de Huesca. Desaparecido desde el miércoles, el sábado se encontraba el cuerpo de un vecino de Oyarzun (guipúzcoa) de 58 años que salió a hacer en solitario -un grave error que hay que evitar- el Pico del Alba de 3.118 m en el Valle de Benasque.
Valle del Hecho, en la comarca de la Jacetania (Pirineo de Huesca). Foto crédito: National Geografic
Hace 8 días, el fin de semana anterior, dos montañistas navarros fallecían también en sendos accidentes. El primero, un hombre de 56 años resbalaba en un nevero y caía desde 150 m en el Valle de Ansó y el segundo, otro varón pero de 36 años, moría al parecer en circunstancias similares en el Pico Bernera, en las estribaciones del Valle del Hecho, en la comarca aragonesa de la Jacetania. Otro joven de 29, esta vez de Bilbao, resultaba herido en cerca de la localidad oscense de Ansó.
La Guardia Civil señala el hielo como una de las causas más probables de los accidentes en todos los casos y advierte del especial cuidado que hay que tener pues muchos se confían, debido a las temperaturas suaves y no prestan atención al peligro que supone la alta montaña en cualquier época del año.
D.E.P.
Fuente: Heraldo (Aragón)