Cardrona Alpine Resort y el empresario de Queenstown, John Darby, han llegado a un acuerdo que permitirá seguir sumando kilómetros esquiables al complejo alpino más grande de Nueva Zelanda.

 

La estación prevé ampliar su dominio por el extremo sur y sureste en la frontera de Queenstown con la cuenca de Soho. La cuenca de Soho añadirá un terreno esquiable adicional de 500 hectáreas de gran altura y hasta 500 metros de desnivel.

 

 

El Real Journeys Group, propietario de Cardrona Alpine Resort, se ha comprometido a continuar su programa de inversión en Cardrona. "Ambas partes estamos muy satisfechas de poder trabajar juntos para crear una zona de esquí de primera categoría con instalaciones y servicios integrados que conformarán el complejo de montaña más grande de Nueva Zelanda y un verdadero destino de esquí de clase mundial ", explica el director ejecutivo de Royal Journeys Group, Richard Lauder, en un comunicado de prensa emitido para anunciar la ampliación.

 

Esta asociación permitirá a Cardrona doblar su tamaño y tener un total de 900 hectáreas de terreno esquiable. El acceso a la zona de esquí de Soho será desde la parte superior de la recién instalada Cubierta de McDougall, con el desarrollo de las instalaciones en la parte alta de la montaña. "La diversidad de pistas en la Cuenca Soho la convierten en una zona de esquí excepcional para todos los niveles. Su elevada altitud y su orientación al sur, significa que recibe y conserva una buena cantidad y calidad de nieve. Soho ofrece espectaculares vistas sobre Queenstown, la cuenca de Wakatipu y a lo largo de la divisoria principal ", concluye el comunicado.

 

Cardrona se ha marcado un calendario de tres años, en un plan de desarrollo de cinco que se ha centrado en preparar el complejo para la expansión de Soho, para mejorar el flujo y la capacidad de los visitantes.

 

Este plan ha incluido la instalación de la "Chondola" de McDougall (un remonte que combina las sillas con las cabinas) para aumentar la elevación, la rehabilitación y reutilización de los edificios de la Área Base y la ampliación del aparcamiento con un servicio de transporte de conexión.

 

 

La expansión también tiene implicaciones en las operaciones de verano de Cardrona, con la oportunidad de crecer aún más como el único resort de montaña de Nueva Zelanda que ofrece un verano completo de actividades que incluyen bicicleta de montaña, coches de montaña, restaurantes...