Lo importante es participar, debía de pensar Lindsey Vonn al terminar en el puesto decimoctavo en Lake Louise (Canadá) y levantaba los brazos tras pasar la línea de meta como si hubiera ganado el oro olímpico o la quinta Copa del Mundo. 

 

Esta grandísima corredora terminó a casi dos segundos (un mundo en una World Cup Race) de la ganadora de la carrera clasificatoria antes de la definitiva que será el viernes 5 de diciembre de 2014, la noruega Lose Smiseth, y mucho más atrás de la formidable "archienemiga" de Vonn en las pistas y fuera de ellas Tina Maze. Aún así, la estadounidense levantaba sus brazos en señal de victoria.

 

 

La ultraconocida esquiadora y modelo norteamericana Lindsey Vonn, que ha ganado en cuatro ocasiones la General de la FIS Word Cup, oro y bronce en los Juegos de Vancouver,2010, 59 victorias en Copa del Mundo de esquí Alpino con un total de 103 podiums, levanta los brazos y grita por la emoción al terminar una carrera de clasificación en la posición 18 detrás de sus más directas rivales, y aún así, lo celebra. ¿Increíble verdad?.

 

¿La razón...?  Muy sencillo, volvía a competir tras la tremenda lesión que sufrió en el Super-G de Schladming (Austria) y que la ha mantenido fuera de las carreras durante todo este tiempo. La euforia por su decimoctavo puesto es porque, según sus propias palabras, "ha sido la primera vez desde entonces que me he sentido al 100 por 100".

 

Que se prepare la Maze (esto lo digo yo)